Para la psicopatología, un delirio es una situación o creencia que se vive como real, con profunda convicción, a pesar de que todas las evidencias demuestran lo contrario. Esta alteración mental, normalmente, está producida por una enfermedad o trastorno en el que confluyen intranquilidad, ideas desordenadas y alucinaciones. Uno de los delirios más terribles es la Parasitosis Delirante. ¿Imaginas lo que debe ser sentir que tu piel está llena de bichos y que por más que hagas no puedes librarte de ellos?

La horripilante Parasitosis Delirante

Se la conoce también como «infestación delirante» o «síndrome de Ekbom». La persona que la sufre cree que su piel está infestada de bichos, parásitos o insectos, cuando realmente no tiene nada. Va acompañada de alucinaciones táctiles y se puede pensar que los animales corren tanto por encima o como por debajo de la epidermis. Es frecuente que los que la padecen se causen heridas tratando de librarse de los parásitos. Para diagnosticarla se necesita el concurso de un psiquiatra y de un dermatólogo.

La horripilante Parasitosis Delirante

Suelen padecerla más las mujeres que los hombres y la edad más propensa es a partir de los 40 años. Existe una variante de la parasitosis delirante conocida como «Cleptoparasitosis ilusoria». En ella el paciente piensa que es su casa la que está infestada de bichos.

La horripilante Parasitosis Delirante

Existen diversos estadios de esta enfermedad según sus causas. El más leve, el primario, se debe normalmente a una psicosis hipocondríaca de un solo síntoma. El secundario suele darse en personas que tienen alguna enfermedad psiquiátrica como la esquizofrenia o la depresión. En el tercer caso, los pacientes son personas que sufren alguna enfermedad médica (cáncer, hipotiroidismo, diabetes, tuberculosis, trastornos neurológicos, etc.) o es debida al consumo de sustancias. La parasitosis delirante en este tercer caso suele dispararse por el hormigueo, picor o comezón que puede producir la medicación o la sustancia consumida. Se ha demostrado que el abuso de cocaína o la desintoxicación del alcohol causan en algunos casos parasitosis delirante. Existe un tratamiento eficaz, pero a muchos afectados les cuesta dejarse tratar ya que no creen que sea una alteración mental, sino algo real.

Existen muchos referentes de la parasitosis delirante tanto en la literatura como en el cine. Entre las películas que hacen referencia a este delirio están «Oldboy» (2003), en la que se ve la parasitosis delirante derivada del consumo de drogas, «Una mirada a la oscuridad» (2006) y «Bug» («Insectos» 2006).

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