Haití es una república situada en las Antillas y es uno de los países más pobres del mundo. Después del terrible terremoto que sufrió, apenas ha levantado cabeza y el 80% de su población vive por debajo del umbral de pobreza. Subsisten básicamente de la pesca y la agricultura. Quizá esta situación de su población la haga más susceptible a prácticas como el vudú y también a la utilización de hierbas y remedios naturales.

¿Por qué los científicos viajan a Haití?

Desde los años ochenta, grupos de científicos viajan a Haití para estudiar la flora del país en búsqueda de plantas que puedan usarse como base para nuevos productos farmacológicos. Están especialmente interesados en las plantas alucinógenas. Quieren, entre otras cosas, descubrir la composición exacta de los «polvos creadores de zombis».

zombis

Piensan que si se descubre la fórmula completa de esta sustancia podrían obtener un nuevo tipo de anestesia que volviera al paciente insensible al dolor y que lo mantuviese paralizado y que esto fuera completamente reversible, pues al finalizar la operación el paciente volvería a su estado de conciencia habitual. Creen que esto podría ser muy útil en determinadas cirugías.

La composición de los polvos creadores de zombis

Desde principios del siglo XX, científicos de todo el mundo se han desplazado a Haití para estudiar a los zombis y el proceso que los lleva a este estado. Los zomis de Haití son reales. Son seres humanos a los que se ha administrado algún tipo de veneno que ha hecho parecer que han fallecido, han sido enterrados y posteriormente se les ha dado alguna substancia que los ha hecho «resucitar». Para la población haitiana, en general, esto es «magia«; se ha resucitado a un muerto. A consecuencia de este proceso el «muerto viviente» sufre un tipo de esquizofrenia llamada catatónica, que le hace pasar períodos de gran actividad y otros de inactividad e incluso de catalepsia.

vudu

El Dr. Davies, etnobotánico de la Universidad de Harvard, investigó la composición de estos polvos. Con ayuda de nativos haitianos supo que para fabricarlos los brujos ponían lagartija, tarántula, algún tipo de gusano y dos tipos diferentes de peces de agua salada. Una vez inducido el estado psicótico catatónico y dado por muerto y enterrado, el brujo «bokor» administra un antídoto a base de plantas que hace revivir al «muerto». Vuelve a la vida en un estado zombi, en el que obedece al brujo totalmente, muchas veces los daños cerebrales por la administración del veneno son irreversibles. Entre los investigadores siempre queda la duda de si estos individuos «zombificados» padecían previamente algún tipo de trastorno mental, que con la experiencia de ser enterrado vivo y «resucitado», se agrava.

vudu

Los polvos pueden ser administrados en alguna bebida o soplados a la cara del afectado. Analizados los polvos contienen entre otras cosas  tetradotoxina, que se encuetra en el hígado del pez globo. También una leguminosa tropical llamada mucuna pruriens, trompeta del diablo (datura metel), estramonio y veneno de Rhinella marina, un sapo tropical.

pez globo

El antídoto que les da el brujo para «revivirlos» es a base de plantas que contienen atropina y escopolamina. Estas substancias causan un impacto terrible en los neurotransmisores y endorfinas cerebrales, hasta el punto de convertir a la persona en un zombi.

trompeta del diablo

La naturaleza nos brinda gran cantidad de substancias, que a pesar de ser potencialmente peligrosas, pueden ser estudiadas y a la larga ser la base de nuevos fármacos que ayudarán a curar o mejorar enfermedades hasta ahora intratables. Por ese motivo el «polvo de los zombis» de Haití despierta tanto interés entre la comunidad científica.

Si te interesan los zombis, quizá quieras saber con este test si sobrevivirías a un apocalipsis zombi.