Por muy increíble que nos parezca, en la época que vivimos existen muchas tribus que se mantienen perfectamente bien alejadas de todo el barullo moderno. Otras quizás no han tenido tanta suerte y sí necesitan el apoyo de las sociedades desarrolladas al encontrarse en estado de seria amenaza. Es el caso de la asombrosa tribu de los Awás, en el noroeste de Brasil.

La tribu más amenazada del planeta vive en una selva al noroeste de Brasil

Los Awás son la tribu más amenazada del planeta y se va extinguiendo poco a poco ante la impotencia de muchos. Cuenta con unos 350 integrantes aproximadamente que, a duras penas, tratan de sobrevivir en los últimos reductos vírgenes que quedan en la selva en la que se sitúan, en el noroeste de Brasil. Selva que en un momento fue completamente suya.

Su situación es tan grave que la organización Survival Internacional ha puesto en marcha una campaña para tratar de salvar a los últimos awás que quedan de las manos de los invasores que ilegalmente ocupan sus tierras y les van arrebatando sus medios de subsistencia. La cuestión es que esta tribu depende íntegramente de la selva. Allí cazan, pescan y recolectan frutos para comer.

Tribu

Algunos de los miembros son nómadas y se desplazan por la misma en grupos de 20 o 30 personas. Generalmente viajan en familia y en esta familia también se incluyen animales salvajes que ellos adoptan como mascotas aunque, a diferencia de lo que ocurre en la sociedad moderna, ellos no privan a estas mascotas de la libertad.

Los Awás necesitan de la protección y la ayuda de todos

Los Awás están seriamente amenazados y viven literalmente rodeados por madereros ilegales que talan los árboles de la selva, por ganaderos que van invadiendo el territorio y por colonos que se instalan y que les van quitando poco a poco terreno. Lo peor de todo es que estas personas que se instalan allí de manera ilegal van armados y al toparse con ellos los matan sin miramientos lo que va reduciendo drásticamente su población. Tampoco hay medidas que haga justicia con estas personas. Es realmente triste.

brasil

El Gobierno de Brasil, por su parte, ha intentado sin recolectar frutos, echar a los invasores y protegerlos. Algunos de los Awás, alrededor de cien, han llegado a huir sin que se les haya contactado nunca. Los otros tratan de hacer lo mismo para sobrevivir pero cada vez cuentan con menos lugares en los que refugiarse.

Para terminar el post, un dato curioso sobre los Awás. Estos, para poder alimentarse cazan monos, pero si alguno de los que cazan son madres con crías, las mujeres Awás amamantan a estas para permitirles sobrevivir en forma de compensar a la naturaleza.

Triste historia que esperamos sinceramente que con la colaboración de todos tenga un final feliz.