Todos mostramos algunas cualidades narcisistas, como estar preocupados por fantasías de éxito o ser fácilmente heridos por la crítica. No obstante, a mayoría de nosotros tenemos personas en nuestras vidas que parecen mostrar estas características todavía más claramente: son personas que adoran y buscan constantemente ser el centro de atención, exageran sus propios logros y suelen hacer gala de una actitud arrogante. De hecho, en algunos casos las personas exudan un narcisismo tan extremo que se ajusta a los criterios del Trastorno Narcisista de la Personalidad, un diagnóstico en el catálogo de los trastornos de salud mental reconocidos por la comunidad médica.
Cómo saber si padeces de Trastorno Narcisista de la personalidad
Un «trastorno de la personalidad», es diferente de un «trastorno del estado de ánimo». Los «trastornos de personalidad» son condiciones que implican que quienes lo padecen cuentan con rasgos que hacen que se sientan y se comporten de manera socialmente angustiosa, lo que limita su capacidad de mantener relaciones normales y les afecta negativamente en otras áreas de su vida.
Es importante recordar que sólo el 6,2 % de la población tiene, en realidad, el Trastorno Narcisista de la Personalidad. Por lo tanto, si bien es muy posible que conozcas a personas que podrían mostrar algunas cualidades narcisistas, el trastorno es más complejo que eso.
El Trastorno Narcisista de la Personalidad afecta seriamente la capacidad de una persona para formar y mantener relaciones saludables con amigos y familiares. Con frecuencia se presenta junto a un trastorno bipolar, anorexia y abuso de sustancias. La buena noticia es que estas características a menudo disminuyen con tratamiento o con la edad.
Los principales síntomas incluyen:
– Un sentido exagerado de su propia importancia y de la justicia para consigo mismos.
– La creencia de que son «especiales» y superiores a los demás. Algo que les hace creer que el resto de la gente los envidia, por eso no los tratan como ellos creen que se merecen.
– Sienten poca o nada de envidia de los demás. Este dato fue corroborado por un reciente estudio publicado en The Journal of Personality, no obstante, cabe destacar que creen que los demás sí la sienten hacia ellos.
– Se aprovechan de los demás. Este es un síntoma característico: «usan» a los demás para conseguir lo que ellos quieren (este rasgo de carácter hace que las personas sensibles, especialmente vulnerables, terminen a veces relacionadas y bajo el dominio de un narcisista).
– El aprovecharse de los demás se debe a que la mayoría carecen de o presentan muy poca empatía. La falta de empatía de un narcisista es una de las principales razones de lo tóxico que es estar cerca de ellos. No toman en consideración los sentimientos y necesidades de las personas de su entorno; en cambio, son más propensos a utilizarlos para su propio beneficio personal.
– No pueden asumir la crítica. Los narcisistas son «altamente susceptibles a esta», pero pueden ser muy críticos con los demás. Eso sí, cualquier mala valoración percibida es suficiente para hacerlos caer en una espiral de ira y tomar una peligrosa actitud defensiva. Esto se debe a que no están capacitados para gestionar estas situaciones, ya que amenazan su sentido de superioridad.
¿Qué puedes hacer? Muy pocas personas con el trastorno reconocen que tienen un trastorno narcisista de personalidad y buscan tratamiento. Al fin y al cabo, si lo hicieran estarían chocando con su supuesta perfección. De hecho, la mayoría de las personas en tratamiento terminan allí después de buscar ayuda para una depresión u otro problema. Así que, si conoces a una persona afectada por el trastorno narcisista de personalidad, no necesariamente puede estar abierto a escuchar lo que piensas sobre él o ella y por ello será complicado recomendárselo. Sin embargo, debes saber que el tratamiento sí existe y puede ayudar a este tipo de personas a aprender a mantener mejores relaciones personales y aumentar su calidad, a regular sus emociones y a tolerar la crítica.
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