Cuando una persona nace con una característica o condición física que la hace salir de la norma y separarse visualmente del resto, seguramente su vida estará marcada por los retos, los desafíos y la resiliencia. Por suerte, los tiempos han evolucionado y los derechos humanos tienen ahora dimensiones más reales. Pero en épocas no tan lejanas, muchas de estas personas eran sometidas a destinos crueles. En Supercurioso investigamos y te contamos en una oportunidad sobre el conmovedor caso de Tom Thumb, el enano del circo Barnum. Ahora hemos querido contarte las extraordinarias vidas de dos hermanos, que fueron vendidos como embajadores de Marte. Acompáñanos a conocer a George y Willie Muse.

La historia de George y Willie Muse es una de las más conocidas en cuanto a personas que pasaron gran parte de su vida en el circo. Podríamos decir que ya desde el momento en que llegaron al mundo y se descubrió su singular aspecto, la mala suerte y la maldad humana alargaron sus zarpas para atraparlos, pero el desenlace que tuvieron finalmente sus andanzas, es algo muy sorprendente y que seguro te llama la atención. ¿Estás listo para conocer las vivencias de los «hermanos de marte» o, los también llamados, «caníbales ecuatorianos»? Pues, empecemos.

¿Quiénes fueron George y Willie Muse?

George y Willie Muse

Ya en otros artículos te hemos contado acerca del  trastorno del albinismo, esa delicada condición en la que se producen alteraciones genéticas del sistema de pigmentación de la piel, los folículos pilosos y los ojos. Pues justamente fue esta la condición que marcó las vidas de George y Willie Muse. Pero estos dos hermanos no solo eran albinos, sino que además eran negros. Aquello elevaba de manera notoria su rareza, y, por lo tanto, la crueldad a su alrededor. Recordemos que aún hoy, la condición de los negros albinos en África es de una dureza extrema, llegando a ver a quienes padecen de albinismo como seres malditos por Dios, castigados por malos actos realizados en vidas anteriores.

Nacidos en la década de 1890, George y Willie Muse fueron vistos por casualidad por unos cazarrecompensas. Viendo la particularidad física de aquellos niños de nueve y seis años, pensaron que serían todo un gancho para atraer dinero en el mundo del circo. Y no lo dudaron: los secuestraron y posteriormente, los vendieron. Los hechos ocurrieron en 1899, en la región de Truevine, Virginia, al sur de los Estados Unidos, y en una época en la que los negros tenían poco o ningún derecho.

Fue así como los hermanos George y Willie Muse crecieron pensando que sus padres habían muerto, y que el mundo del circo tan solo les había querido dar una segunda oportunidad. No recibieron ninguna educación, cariño o cuidados adecuados. Se les obligaba a dejar crecer el cabello, de forma que sus rastas de cabello rubio casi blanco, les diera un aire más sobrenatural, más salvaje.

Explotados por la industria del circo

albinos famosos

El secuestro sería tan solo el inicio de la historia de George y Willie Muse como prácticamente esclavos del circo. A principios del siglo XX, el director de circo Al G. Barnes se sirvió de ellos para crear un espectáculo donde ambos chicos debían hacer de caníbales ecuatorianos blancos. Se les llamó Eko e Iko. No obstante, después de varios tours, se dieron cuenta de que el espectáculo no gustaba demasiado, así que crearon otro: debían ser «embajadores de Marte».

Se les obligó a tocar un instrumento, la mandolina. De esa forma algo ridícula, el público, entre risas y asombro disfrutaba enormemente de aquella esperpéntica actuación. Y la compañía gano dinero, mucho dinero, altas cantidades de las cuales, los hermanos Muse jamás vieron un dólar. En 1927, empezaron a trabajar para la famosa compañía circense «Ringling Brothers and Barnum & Bailey Circus», momento en que la casualidad, les trajo por fin algo bueno: su madre finalmente les localizó. Levantó cielo y tierra, demandó pública y legalmente al circo, y al poco tiempo, los dos jóvenes fueron «liberados».

De vuelta a los espectáculos

negros albinos

La salida de los circos explotadores y el reencuentro con la madre fue sin duda de los mejores momentos en las vidas de George y Willie Muse. Pero… ¿Terminó todo esto aquí? ¿Finalizó el periplo de los hermanos albinos con el reencuentro familiar? En absoluto. Aconsejados por su familia, decidieron presentar una demanda por el secuestro, y por no haber percibido ningún salario por su explotación a lo largo de esos largos veinte años. Al principio pidieron un pago de 100.000 dólares, sin embargo, ocurrió algo. El juicio se retrasó y, con ello, la expectación popular perdió fuerza y sus nombres, dejaron de aparecer en la prensa.
Los resultados del juicio fueron verdaderamente decepcionantes para George y Willie Muse. De hecho, recibieron tan poco dinero, que fueron conscientes de algo: la única forma de sobrevivir era volviendo al mundo del espectáculo. Y por asombroso que nos parezca, así lo hicieron… Y con mucho éxito para sorpresa de ellos mismos. En el Madison Square Garden conseguían cerca de 10.000 espectadores cada noche. Pero esta vez había una diferencia fundamental: el espectáculo y los beneficios eran para ellos, así como el triunfo.
En la década de 1930, George y Willie Muse recorrieron Europa, Asia y Australia. Actuaron para la realeza, incluso para la reina de Inglaterra. Siempre vivieron juntos, llevaron una buena y larga vida, hasta que George Muse murió en 1971. Puede que pienses que como siempre ocurre en estos casos, al poco le siguió su hermano Willie… Pero la verdad es que no fue así, su longevidad fue asombrosa, puesto que siguió actuando y tocando la mandolina casi hasta el día de su muerte: el Viernes Santo de 2001.
Y tú, ¿Conocías la alucinante y agridulce historia de los hermanos George y Willie Muse? Víctimas del sensacionalismo y la crueldad humana, lograron separarse de sus orígenes trágicos para vivir su propia realización, ya como artistas independientes. Si conoces el caso de algún otro personaje de circo que quisieras conocer en mayor profundidad, déjanos un comentario. Estaremos encantados de satisfacer tu curiosidad. Y si ha gustado este tema, no te pierdas el artículo en el que te contamos las vidas de los más populares albinos famosos.