Es un ejercicio mental. Suponer un mundo distinto nos permite poner en perspectiva la “realidad real”, como ese hermoso poema de José Agustín Goytisolo en donde un lobito bueno es maltratado por los corderos, o hay brujas hermosas, príncipes malos y piratas honrados.

Imaginar un mundo en donde a los hombres les venga la regla, en lugar de a las mujeres, puede resultar divertido. Pero también puede ser un indicativo que nos señale los problemas que aún enfrentamos las mujeres a la hora de la menstruación.

Así opina una ONG británica, WaterAid, que lanzó una campaña de firmas para lograr el Día de la Higiene Menstrual y concienciar a la población mundial (sobre todo masculina) de las dificultades cotidianas que las mujeres deben salvar cada mes, en cada ciclo menstrual, y que serían bien distintas si fuesen los hombres los que tuviesen “esos días”.

Son 6 puntos con los que WaterAid explica esta improbable realidad masculina.

1. Señal de masculinidad el sangrado menstrual

No sería para nada un tabú, presumirían delante de todos el que cada mes les venga la regla.

2. La primera regla sería celebrada

Y por todo lo alto, y a la vista de todos, no como muchos rituales femeninos, que se hacían a escondidas. Se les daría la bienvenida a la madurez y a la masculinidad.

3. En el deporte sería algo muy serio

Los deportistas menstruantes serían objeto de estudio, tendrían acompañamiento y entrenadores especializados, compañeros de equipo para afrontar y entender los cambios hormonales y coordinar el período antes de las grandes competiciones.

4. No habría eufemismos, se llamaría regla

¿Verdad que hay muchas frases alusivas? Esos días del mes, la visita, la tía, los días femeninos

menstruación

Si a ellos les viniese la regla, se llamaría simplemente regla.

5. Derecho universal: tampones y toallas sanitarias

Estos artículos serían subsidiados por la Seguridad Social de todos los países, y se enviarían en los paquetes de ayuda humanitaria a países en guerra, en vías de desarrollo o víctimas de catástrofes naturales junto a la comida, el agua y las medicinas. Obviamente, “ningún hombre debería sufrir la indignidad de verse privado del apoyo higiénico necesario durante la menstruación”.

6. Anuncios publicitarios bien distintos de tampones

Ya no veríamos líquidos azules que caen en una toalla sanitaria o un tampón para saber si son absorbentes. Serían diseñados por grandes científicos.

Es una original campaña publicitaria para sensibilizar acerca de la realidad femenina, y hacer saber que en el mundo millones de niñas y mujeres no tienen acceso ni a agua ni a artículos higiénicos que las ayuden.

Si quieres también puedes firmar la petición que aparecerá en pantalla, después de ver este comercial.