Las lentes de contacto son una de las mejores soluciones para superar los problemas de visión. A continuación, puedes leer 5 motivos por los que es recomendable su uso.
5 Razones para usar lentillas
1. Las lentillas permiten ver bien
Es una perogrullada, pero es necesario recalcarlo: el uso de las lentillas adecuadas garantiza poder ver bien. Las lentes de contacto se adhieren y se adaptan al ojo formando una única capa que te permite recuperar la calidad de tu visión. El efecto que producen es el mismo que el de unas gafas graduadas, pero con la ventaja de no tener que llevarlas todo el día.
Además, el campo de visión es mayor, puesto que la montura no se interpondrá entre tú y los objetos que mires.
2. Son muy fáciles de conseguir
Comprar lentillas es muy sencillo a día de hoy. Se pueden adquirir tanto en ópticas físicas como en tiendas online.
El precio de las lentes de contacto es muy asequible y cualquiera se las puede permitir. Desde luego, son mucho más baratas que unas gafas, y en el caso de que las pierdas o las dañes no resultará tan traumático, sobre todo, a nivel económico.
A la hora de calcular el coste debes tener en cuenta que también necesitarás líquido de lentillas. Aun así, siguen teniendo un precio accesible para todos los bolsillos.
3. Son muy cómodas
Uno de los puntos fuertes de las lentillas es su comodidad; te las pones y te olvidas de ellas hasta que te las tengas que quitar. Ponerlas es muy sencillo y rápido.
No se empañan como las gafas cuando entras en un ambiente más cálido. Las gotas de lluvia no se quedan entorpeciendo la visión, algo habitual con las gafas.
Las lentillas aportan una mayor libertad de movimientos, de hecho, son la mejor opción para practicar deporte. Si usas gafas mientras haces deporte, puedes dejarlas caer de manera involuntaria o recibir un golpe que las rompa. En este supuesto, ya no se trata solo de que tengas que comprar unas nuevas, algo que para muchas personas puede ser trastorno, sino que también puedes poner en riesgo tu integridad física, provocando heridas en la cara y, lo que es peor, en los ojos.
4. Existen diferentes tipos de lentillas entre los que elegir
No existe un único tipo de lentillas. Las clasificaciones son muy variadas y atienden a diferentes criterios:
- Dureza: rígidas, semirrígidas, blandas –las más comunes-, híbridas y de colores o cosméticas.
- Tiempo de uso: diarias, quincenales, mensuales, de uso prologado.
- Tipo de corrección: esféricas, tóricas, progresivas.
Dependiendo del tipo de problema de visión que tengas y del uso que les vayas a dar, deberás escoger unas u otras. Consulta con tu oftalmólogo para comprar tus lentes de contacto ideales.
5. Se complementan a la perfección con las gafas
Usar lentillas no significa renunciar para siempre al uso de las gafas, de hecho, son dos elementos perfectamente complementarios e incluso pueden usarse a la vez. Puede que un día te apetezca usar gafas, y otro, lentillas.
La decisión es tuya. Aprovecha para crear diferentes looks que te ayuden a reforzar tu propia confianza.