En el siguiente artículo queremos hablarte de cómo mantener el deseo hacia tu pareja a pesar de los años. ¿Eres de esas personas que suelen tener relaciones largas? Cuando hablamos de relaciones largas, hablamos de esas relaciones de 5, 10, 15 o más años. Si tu respuesta es que sí, no hará falta que te digamos que las mariposas que sentiste al inicio de tu relación podrían haber disminuido con el paso de los años, ¿cierto?
Y no estamos hablando de que ya no quieras a tu pareja o incluso de que ya no cuides de ella, ni siquiera decimos que ya no lo encuentres atractivo o atractiva de la misma manera. Lo que queremos decir es que, por alguna extraña razón, la confianza y la familiaridad parece ser que ralentizan un poco la vida sexual de las parejas.
Esto no tiene por qué suponer un problema, ya que hay una explicación para ello y, además, algunos investigadores de este campo saben cómo mantener el deseo en una relación porque han podido crear un modelo predecible de las causas de esta desaceleración y, lo que realmente importa, de qué manera podemos volver a calentar los motores y aumentar esa aceleración en la relación.
Los estudios apuntan a que es difícil mantener el deseo y evitar esa desacelaración natural
Así que, en definitiva, esas son las malas noticias, siempre que te quedes con una pareja muchos años, notarás una cierta disminución de la frecuencia de vuestra vida sexual, y eso pasa sí o sí, es inevitable.
En 2015 se realizó un estudio centrándose en más de 1000 parejas de Alemania. Querían descubrir si habían conseguido mantener el deseo sexual a lo largo de los años. Lo que descubrieron los investigadores fue que había una marcada caída en la vida sexual justo a los dos años, más o menos, de relación.
De media, las parejas que investigaron, declararon mantener hasta cinco veces menos relaciones sexuales por mes que al principio de su relación. A partir de esa primera caída repentina de actividad a los dos años, todo se estabilizó un poco aunque volvió a desacelerarse hasta los siguientes dos años.
¿Por qué es difícil mantener el deseo sexual después del tiempo?
El tiempo no es el único que puede afectar a la disminución de la actividad sexual en una pareja. Existen otros factores que también influyen y son igualmente predecibles como pudieron verificar los investigadores. Por ejemplo, los embarazos conducen a una fuerte disminución del deseo sexual pero no solo durante la gestación, sino más allá del nacimiento del bebé, llegando incluso a los primeros años de vida del niño.
Otras causas que hacen que mantener el deseo se complique son las crisis de pareja, algo que evidentemente tiene sentido.
Sin embargo, existen momentos en la vida de una pareja que podrían aumentar esa frecuencia sexual, pero los investigadores se dieron cuenta de que no era así; estamos hablando de acontecimientos como comprometerse, irse a vivir juntos… prácticamente estos hechos no modificaron la trayectoria en cuanto al deseo sexual.
Esto daba a los investigadores una constante muy clara: todas las parejas monógamas están condenadas a desacelerar su deseo sexual a medida que pasan los años.
Como a nosotros no nos gustan las verdades absolutas, hemos indagado un poco más y te vamos a contar como burlar esta afirmación, como mantener el deseo vivo en tu pareja más allá de los años que llevéis juntos. ¿Te apuntas?
¿Cómo mantener el deseo en una pareja?
No queremos que pienses que son todo malas noticias en este artículo. Es verdad, como te decíamos, que la lívido disminuye cuando hay un niño pequeño en casa. Suponemos que el bebé se lleva toda la energía de los padres, así que cuando uno cae en la cama en lo único que piensa es en descansar. Pero debes saber que cuando ese niño crezca y se vaya de casa, tú y tu pareja experimentaréis un rejuvenecimiento en vuestra relación, como una segunda juventud.
Otro término que entra en juego es la autoexpansión. Los investigadores se dieron cuenta de que la atracción sexual de una pareja aumentaba cuando se veían desde una nueva perspectiva. Esa nueva perspectiva se adquiere practicando una nueva habilidad, como puede ser un idioma nuevo, un rol nuevo familiar, ser abuelos… eso hará crecer el deseo hacía su pareja a quien seguramente verá con nuevos ojos.
A pesar de todo lo que comentamos, el declive de la vida sexual de una pareja tampoco es el fin del mundo. Los estudios demuestran que incluso las relaciones más apasionadas pueden acabar convirtiéndose en relaciones de compañeros y de cariño con el paso de los años. La diferencia entre ambos tipos de amor es que el amor apasionado se caracteriza por grandes sentimientos y mucha pasión y el amor de compañía se basa en la confianza, el apoyo mutuo y el cariño. Todas esas cosas son lo suficientemente buenas como para compensar la disminución de la pasión, ¡porque tampoco decimos que desaparezca!
¿Cómo ves tú las relaciones? ¿Has tenido problemas para mantener el deseo en tus relaciones largas? ¿Cuál crees que es el pilar básico en un amor? ¿La pasión, la confianza, ambas…? ¡Cuéntanos tus experiencias! ¡Estaremos encantados de leerte!