Estas obras de arte con tecnología moderna no te dejarán indiferente. No estamos hablando de arte de los cincuenta, retrofuturista y con aparatos dignos de Star Trek, no. Estamos hablando de arte de hace, como mínimo, un siglo y medio en el que se colaron algunos dispositivos que podrían demostrar que los Viajes en el Tiempo existen… Porque ¿qué otra cosa podrían ser estas obras de arte con tecnología moderna?
En ellas encontrarás helicópteros en el Antiguo Egipto, Jesús abrazado a un satélite, una chica usando un iPhone… Sea cierto o no, y existan o no los viajes en el tiempo (me da envidia solo pensar el tipo de cobertura que tendrán como para poder cazar pokémones en pleno siglo XIX) es divertido echarles un vistazo y especular. En Supercurioso te proponemos que nos acompañes a descubrirlas, ¿te animas?
5 Asombrosas Obras de Arte con Tecnología Moderna
1. La esperada (y su iPhone) – Ferdinand Georg Waldmüller (1860)
Una chica pasea tranquilamente por el bosque mirando a su teléfono móvil, enviando whatsapps, mirando las redes sociales o subiendo una foto de sus zapatos a Instagram. En un recodo del camino, a la sombra y arrodillado, le espera un galán con una rosa en la mano y un sombrero irresistible. Esta situación no sería nada del otro viernes si no fuera porque… ¡Es una pintura datada de 1860!
Considerada por algunos una prueba “definitiva” de que los viajes en el tiempo existen, internet enloqueció cuando Peter Russell, el primero en darse cuenta de este increíble detalle, colgó la foto en Twitter: tanto por la forma del misterioso objeto como por la postura de la chica (inclinada, absorta y distraída), parecía que no pudiera ser otra cosa.
Russell, sin embargo, sostiene que la tecnología ha cambiado nuestra manera de mirar y de percibir las cosas. Hoy en día, todos lo que miramos este cuadro reconocemos a una chica inmersa en su teléfono. Pero ¿qué es lo que veían los demás antes del auge de las tecnologías? Una chica inmersa… En su libro de plegarias.
2. Crucifixión (a mi no me mires, yo voté a Kodos) – Fresco en la catedral de Svetitskhoveli (siglo XI)
Hay muchas obras de arte con tecnología en las que parece haber presentes extraterrestres (o como mínimo, platillos voladores) de fondo, especialmente volando detrás de escenas de crucifixión. En este artículo nos fijaremos en el fresco que hay en una de las paredes de la catedral de Svetitskhoveli, en Georgia, en el que aparecen una especie de platillos voladores o medusas detrás de la escena principal.
Obras de arte como ésta han llevado a un gran número de conspiradores de internet a afirmar que los aliens estuvieron presentes durante la crucifixión de Cristo, que de alguna manera tuvieron algo que ver en la conspiración que le llevó a la muerte o incluso que Jesús era uno de ellos.
Sin embargo, los expertos afirman que se trata de ángeles guardianes. Aunque la mayoría relacionamos a los ángeles con seres alados y aureolados, lo cierto es que se pueden representar de muchas maneras. El por qué este artista escogió la forma de una nave nodriza en forma de medusa ya sí que es un misterio.
3. Hombre entregando una carta a una mujer en un recibidor (Mari, dile a tu prima que no quiero ya más fotos de buenos días) – Pieter de Hooch (1670)
De nuevo un caso de obras de arte con tecnología en el que parece que alguien sostiene un iPhone en una época en la que era imposible. En la pintura vemos a un hombre acercándose a una mujer con lo que parece ser un smartphone.
Este caso se hizo especialmente famoso porque fue Tim Cook, el CEO de Apple, quien lo “encontró” durante una visita al Rijksmuseum de Ámsterdam. Al preguntarle cuándo se inventó el iPhone, Cook respondió que no estaba seguro, ya que había visto un cuadro en el que aparecía el teléfono en cuestión. Se refería, por supuesto, a esta pintura. El misterio en este caso queda resuelto por el título: se trata de un pedazo de papel que el hombre entregará a la señora del pendiente de perla.
4. Jeroglíficos en el templo de Seti I (y en la pirámide me ponéis un helipuerto) – Abidos, Egipto (hace unos 3.000 años)
Muchas teorías conspiranoides circulan sobre estas impactantes obras de arte con tecnología que consisten en una serie de jeroglíficos de este templo de Egipto, en los que supuestamente aparecen helicópteros y aviones. Dicen los rumores que los egipcios eran tan listos que seguro que habían construido este tipo de aparatos voladores o que, como mínimo, los vieron surcar el cielo.
Hay incluso quien afirma que fue una “raza superior” la que les ofreció a los egipcios planos y materiales para poder construir unas máquinas tan avanzadas. Y hay quien dice que son (otra) prueba de posibles viajes en el tiempo. ¿Qué dicen los expertos? Pues que se trata de algo bastante común en este tipo de escritura: dos jeroglíficos superpuestos. Es decir, lo que parecen helicópteros y aviones no son más que con dos nombres: en una capa pondría Seti I y en la otra, Ramsés II.
5. Glorificación de la Eucaristía (cojamos cada uno una antena, a ver si se carga ya Netflix), Ventura Salimbeni (1600)
Finalmente, otro de los clásicos más queridos para los fans de los OVNIs o de las obras de arte con tecnología en general: Jesús y Dios agarrando cada uno una antena de lo que parece el satélite Sputnik entre los dos. Las teorías usuales de viajes en el tiempo, aliens, etc. vuelven a hacer acto de aparición en este cuadro del bueno de Ventura Salimbeni que pueden encontrar en una iglesia de Siena, en Italia.
La solución al misterio es mucho más prosaica de lo que parece, ya que se trata de una interpretación de la esfera celeste. De hecho, si te fijas, las “lucecitas” no son más que el Sol y la Luna.
Las obras de arte con tecnología no son tan misteriosas una vez sabemos qué representan, pero siguen siendo curiosas, ¿verdad? Cuéntanos, ¿qué obra de arte te ha impactado más? ¿conoces algún otro ejemplo de este estilo? ¡Recuerda que puedes contarnos lo que quieras si nos dejas un comentario!