Cuando se acerca el gran momento de hacer una mudanza, cuando está todo preparado para ir de un domicilio a otro, es cuando entra en juego el punto más importante. ¿A qué empresa de mudanzas llamar? Antes, era la cuestión que más rondaba la cabeza de quienes planeaban mudarse, pero, desde hace unos años, la opción del alquiler de furgonetas ha ido ganando mucho terreno.
Una solución útil para muchas ocasiones, de hecho, no son pocos los profesionales dedicados a la mensajería y la entrega de paquetes que deciden alquilar o hacer renting de este vehículo para contar con ventajas; pero que cobra especial sentido cuando se trata de cambiar de lugar todos los bultos que se acumulan en una vivienda.
La idea es sencilla: alquilas la furgoneta y la usas para tu mudanza. Evidentemente, requiere un mayor esfuerzo, ya que no vas a contar con todo un equipo de trabajadores que se encarguen de descargar y cargar todos los bultos entre un domicilio y otro, no obstante, las ventajas que presenta esta propuesta son tantas y tan positivas que cada vez hay más personas que se animan a organizarse por su cuenta para conseguir lo que quieren.
5 razones por las que alquilar una furgoneta para tu mudanza
De todas las razones por las que es mejor alquilar una furgoneta en caso de estar preparando una mudanza, estas son las cinco más destacables. Cinco motivos que, a partir del momento en el que los conozcas, te harán ver esta opción como algo mucho más interesante y atractivo que cualquier otra.
Precios más bajos
Contratar a una empresa de mudanza puede hacer que pagues un mínimo de 300 euros por tu caso, y eso recurriendo siempre a las ofertas de los vehículos de menor capacidad. No solo pagas por la furgoneta, estás pagando también por la asistencia de todo un equipo cuya mano de obra debe cubrirse económicamente, de ahí que la cifra sea mucho más alta que la del alquiler de una furgoneta.
Si te decantas por alquilar el vehículo para tu mudanza, evidentemente no vas a contar con todo un equipo de trabajadores ayudándote, pero sí que vas a ahorrar mucho dinero. De hecho, hablamos de una cifra que puede ser hasta 3 veces inferior al precio más bajo del servicio de mudanza de una empresa dedicada.
Vehículo a medida
En muchas ocasiones, las empresas que ofrecen servicios de mudanzas no permiten escoger entre muchos tipos de vehículos, pasando de las furgonetas a los camiones automáticamente a la hora de contar con sus servicios. Eso, además de hacer que los precios cambien de una forma brutal, también hace que tengas mucha menos flexibilidad para mover las cosas de tu casa al nuevo domicilio.
Una calle estrecha, poco aparcamiento… Hay muchos motivos por los que es mejor tener la opción de escoger el tipo y tamaño de vehículo necesario para llevar a cabo la mudanza, y eso es algo que también se garantiza al alquilar, ya que las empresas suelen tener un catálogo bastante amplio de opciones.
Total disponibilidad horaria
A veces, poder organizar una mudanza con una empresa de transportes o mudanzas puede resultar complicado, ya que cuentan con una agenda en la que tienen que cumplir con las peticiones de clientes con los que se ha acordado trabajar previamente. Es algo totalmente lógico, pero también totalmente evitables si te decantas por alquilar una furgoneta para mudarte.
Solamente tienes que elegir el día y la hora a la que vas a empezar. El resto es recogerla, utilizarla y devolverla según lo acordado a la hora de formalizar el alquiler. El planteamiento es tan simple como eso, sin necesidad de complicaciones ni tener que concretar citas de ninguna clase.
Tú distribuyes los bultos
Para tu total tranquilidad, tú puedes escoger cómo y cuándo quieres colocar los bultos en la furgoneta que vas a usar para tu mudanza. Las empresas profesionales suelen hacer eso por el cliente, para que este no tenga que preocuparse; pero eso hace que, precisamente, se disparen las preocupaciones por el posible descuido a la hora de cargarlo todo.
Si alquilas la furgoneta, no vas a tener a nadie diciéndote cómo distribuir los bultos de tu mudanza. Tú eliges y decides en función de cómo quieras llevar las cosas. Estarás mucho más tranquilo así.
Tú controlas el cuidado de los bultos
A colación del punto anterior, el cuidado de cada bulto es algo que corre totalmente por tu cuenta. Más de una persona ha tenido problemas por los descuidos de las empresas de mudanzas, haciendo que se rompan determinadas cajas o bultos que fueran especialmente frágiles y necesitaran más cuidado que el resto.
Aquí, el que se encarga de cuidar el estado de los bultos eres tú, y quienes hagáis la mudanza. Eso implica que vas a poder asegurarte de que todo se coloca bien y de forma que no sufra daños, como también de que las piezas más frágiles estén bien protegidas en todo momento.
Ahorro, flexibilidad y disponibilidad. Estas son las tres principales claves que motivan el alquiler de furgonetas para mudanzas. La opción de contar con empresas especializadas siempre está ahí, pero con este método se tiene algo totalmente a medida y sin necesidad de depender de terceros, algo bastante importante para un caso como este.