La sociedad ha evolucionado hacia unos hábitos de ocio y de consumo de información muy marcados por la presencia de las nuevas tecnologías. Según se deriva de un estudio elaborado por la empresa demoscópica Sondea para Multiópticas, los españoles pasan casi la mitad de cada año (167 días) frente a todo tipo de pantallas electrónicas. Aunque nuestra salud ocular depende en buena medida de factores hereditarios, estas condiciones externas influyen poderosamente en la aparición y agravación de todo tipo de afecciones.
Prestar atención a los síntomas de la vista cansada ayuda a detectarla de manera precoz. Pero, ¿qué es exactamente? ¿Por qué se produce y cuáles son sus síntomas? A continuación, te hablamos de ello. ¡Presta atención!
1. Vista cansada: ¿Qué es?
El fenómeno de la vista cansada recibe el nombre de presbicia. En realidad se trata de una enfermedad que conlleva la pérdida gradual de la capacidad para enfocar en las distancias cortas. Aunque puede presentarse en cualquier rango de edad, es bastante más habitual a partir de los 45 años.
2. Pero, ¿qué causa esta condición?
Desde un punto de vista anatómico, el origen del problema se encuentra en el cristalino. Su función principal es enfocar objetos a cualquier distancia y ésta puede verse mermada con el paso del tiempo. El envejecimiento hace que pierda, progresivamente, su movilidad, elasticidad y transparencia. Como consecuencia, afecta a la visión cercana. Además, la opacidad del cristalino aumenta progresivamente con el paso de los años, con la dificultad en la visión que eso conlleva.
3. ¿Cómo saber si sufres de vista cansada o presbicia?
La presbicia es relativamente fácil de detectar. Algunos de sus síntomas más habituales son:
- Problemas de enfoque: Al deteriorarse el cristalino, esta estructura ocular no puede realizar la función de enfocar como antes, y eso altera la calidad de nuestra visión. Esto se aprecia cuando pasamos de mirar en corta distancia a larga, ya que notamos que nos cuesta ver con nitidez.
- Fatiga ocular: La sensación de fatiga ocular provocada, entre otros factores, por la continua exposición a la radiación lumínica de las pantallas, produce síntomas como sequedad ocular e irritación en la zona.
- En algunas ocasiones la fatiga visual puede generar de forma indirecta dolores de cabeza habituales.
4. ¿Cómo prevenir y reducir los efectos producidos por la presbicia?
La presbicia surge por un proceso natural como es el envejecimiento, que no se puede prevenir. Como pacientes, lo mejor que podemos hacer es detectarla a tiempo, para aplicar soluciones como el uso de gafas o cirugía.
Para encontrar el tratamiento o la técnica quirúrgica más adecuada para el paciente, es esencial realizar un análisis individualizado, con el que poder detectar factores importantes como su edad o sus preferencias.