Todos conocemos a alguien misterioso que es capaz de hacer algo que nadie más puede. Es la típica persona que hace malabarismos con la primera cosa que encuentra o que es capaz de imitar sin problemas a quien se proponga. ¿Cómo lo hace?
Lo que es evidente es que ha dedicado un montón de tiempo a practicar, ¡incluso en horario de trabajo! Su secreto consiste en encontrar el modo de aprender los pequeños trucos que le permiten desarrollar su técnica mucho mejor que al resto de los mortales. En este artículo presentamos cinco habilidades que todo el mundo puede desarrollar para sorprender a amigos y extraños.
Habilidades impresionantes que todos podemos aprender
1. Resolver el cubo de Rubik en 60 segundos
Todos hemos visto videos en YouTube en los que niños de apenas 8 años usan la mente de un modo que resulta inexplicable. ¿Han nacido con un don especial? ¿Hacen trampas? ¿O es pura magia? La respuesta es que simplemente están siguiendo un proceso que han aprendido de los mejores. Es evidente que tienen una gran pericia y una velocidad impresionante, pero no deja de ser un proceso repetitivo.
¿Y eso qué quiere decir? Pues significa que cualquiera puede aprender los mismos pasos que están siguiendo y, con mucha práctica, ser capaces de resolver el cubo con los ojos cerrados. Para poder resolver el cubo de Rubik a toda velocidad, es necesario dominar y automatizar los pasos clave. Hay que trabajar todas las fases de la solución hasta memorizarlas por completo, y luego ya se trata de calentar los dedos y echar horas de práctica. Sin darnos cuenta, cada vez iremos mejorando nuestros tiempos.
2. Hablar un segundo idioma con soltura
La clave de los idiomas es practicar: cuanto más se practican, mejor nivel se adquiere. Es imposible hablar bien un idioma desde el primer día, por lo que haríamos bien en recelar de aquel que diga lo contrario. Lo que hay que hacer es buscar el modo de practicar el idioma con hablantes nativos o usar una aplicación de conversación. De esta manera, nos vemos obligados a pensar en otro idioma, lo que nos permite empezar a dominarlo.
Con el tiempo, iremos adquiriendo confianza y nos atreveremos a ir un paso más allá. Una buena manera de acelerar el aprendizaje es reservar una escapada de fin de semana en el país cuyo idioma estamos aprendiendo. Ello nos pondrá una fecha límite y hará que nos centremos en la tarea de aprender. Ahora solo queda esforzarse un poco cada día para ir mejorando.
3. Ganar al blackjack
Hay muchos sistemas y trucos para ganar al blackjack, pero ¿cuántos de ellos funcionan realmente? Para ganar al blackjack, hay que saber cómo derrotar a la banca sin que parezca que hacemos trampas. La clave es conocer las estrategias de conteo de cartas y practicarlas con los amigos. Debemos empezar marcándonos objetivos pequeños e ir mejorando poco a poco. Al cabo de un tiempo, nos daremos cuenta de que parece que tenemos siempre la suerte de cara.
4. Dibujar como un artista
Agarrar un lápiz y ponerse a dibujar es una de esas cosas que parecen fáciles si sabemos lo que hacemos, pero que resultan aterradoras si somos principiantes. No deberíamos avergonzarnos si no sabemos dibujar bien, ya que existen múltiples técnicas para mejorar. Como pasa con todas las actividades con sutilezas y matices, la clave es aprender los conceptos básicos lo antes posible. En lugar de intentar hacer cosas más complicadas, lo ideal es apuntarse a un curso para principiantes para empezar a explorar luces y formas. Con apenas unas clases, nos daremos cuenta de que nuestro planteamiento con el dibujo es completamente diferente, y muy pronto la gente se sorprenderá gratamente de nuestro nivel.
5. Dar una charla TED
No hay nada que produzca más miedo a la mayoría de la gente que tener que hablar durante un buen rato ante un nutrido público. Sin embargo, hay gente que parece tener un don natural para subirse a un escenario y meterse a los espectadores en el bolsillo desde el momento en que abren la boca. ¿Cómo lo consiguen? Practican dando charlas en clubes de conversación y visualizándose encima de un escenario ante un público entregado. Una vez conocido el secreto, ¡ya podemos hacer lo mismo!
Conclusión
Todo lo que hay que hacer es elegir la habilidad que queramos desarrollar, practicar todo lo que podamos y convertirnos en una de esas personas con talento que dejan a todo el mundo preguntándose cómo lo hacen.