Cuando el filósofo griego introdujo la nación isleña en sus diálogos socráticos Timeo y Critias, ambos escritos hace mucho tiempo, en el 360 a. C., sirvió como contraste con Atenas como ciudad-estado ideal. Sin entrar en los detalles de la filosofía de Platón en lo que respecta a la Atlántida, la isla fue una utopía dotada de dioses que se corrompió por la codicia humana y el declive moral.
Al principio, Atlantis era un reino exuberante y virtuoso que no se definía a sí mismo a través de la riqueza y el poder. Más tarde, se emborrachó tanto de su propio poder que le hizo la guerra a la Atenas más modesta (pero también más justa y noble). Pero la conquista naval que Atlantis intentó fue rechazada por los advenedizos atenienses y, poco después, los dioses castigaron a Atlantis con una avalancha de terremotos e inundaciones que la sumergieron en el mar. O eso es lo que dice la historia…
La leyenda de la Atlántida ha continuado mucho después de su supuesta desaparición bajo el agua. Tras su debut en Timeo y Critias, la mítica Atlántida se ha convertido en un fenómeno de la cultura pop. Los pensadores a lo largo de los siglos no han dejado de reinterpretar su narrativa utópica, o al menos de utilizar sus lecciones para sus propios propósitos e, incluso a día de hoy, se siguen llevando a cabo estudios que afirman que la Atlántida existió y fue real, según informa Cádiz Directo.
El retrato de la Atlántida de Platón
La historia de la Atlántida se ha duplicado y adaptado, tanto que ha habido debates sobre los vínculos de la isla con la historia antigua de la vida real. De hecho, las ciudades hundidas y las sociedades perdidas se han relacionado con la existencia de la Atlántida, acercándose a demostrar que la ficción es un hecho. Por ejemplo, las ruinas de la antigua ciudad egipcia de Heraclion se encuentran actualmente sumergidas en las aguas mediterráneas de la bahía de Abu Qir. Se ha planteado la hipótesis de que la isla de Santorini (ubicada cerca de Grecia en el mar Egeo) fue la inspiración para la Atlántida de Platón, ya que la isla sufrió una enorme erupción volcánica hace unos 3.600 años que se cree que finalmente diezmó a la civilización minoica.
Cualquiera que fuese el modelo para su creación, Atlantis y su lección sobre los peligros de la arrogancia nunca han pasado de moda, incluso después de miles de años. En todo caso, la popularidad ilimitada de la isla en la literatura, el cine y los cómics solo ha hecho que su conexión con el mundo real sea aún más fuerte.
La última aparición de Atlantis fue en la película Aquaman, donde la ciudad-estado juega un papel importante en la configuración de la identidad de Aquaman.
Si bien Platón no da muchos más detalles sobre la Atlántida una vez que es tragada trágicamente por el mar, es precisamente donde este lo deja que Aquaman lo retoma.
Se encuentran similitudes en el personaje del propio Aquaman quien, similar a los Atlantes del Timeo de Platón, es mitad dios, mitad humano y posee poderes sobrenaturales mucho más allá de la comprensión mortal: ¿Te imaginas poder comunicarte telepáticamente con una ballena?
La Atlántida de Platón, tal como está escrita en sus diálogos, es una pequeña referencia de una magnífica ciudad-estado, pero la leyenda ha encontrado una nueva vida gracias a franquicias como Aquaman. El mito de la isla, así como el origen de su historia, parece destinado a seguir expandiéndose desde aquel primer esbozo que fue presentado por Platón.