Aunque todavía quedan algunas personas que sí conciben la vida sin un teléfono móvil inteligente y sin las aplicaciones que se pueden descargar en él, la verdad es que la gran mayoría considera a estas herramientas tecnológicas como esenciales, imprescindibles para muchas de las tareas cotidianas, laborales y de ocio, como jugar en los momentos libres con la app de 1 win.
Por ello, hoy en día, hacer uso de las diferentes aplicaciones es una labor común, completamente integrada a nuestra vida, pero ¿sabes de dónde provienen o cuál fue la primera app de la historia? ¡En este artículo te contaremos todo al respecto!
¡A viajar en el tiempo! Descúbrelo todo sobre cuál fue la primera app de la historia
En aras de indagar en cuál fue la primera app de la historia, es necesario remontarnos a la década de los 90, una época clave para este desarrollo tecnológico.
A lo largo de esos diez años, la sociedad fue testigo de importantes avances en el campo, los cuales condujeron a la creación de aplicaciones básicas que cubrían las primeras funciones de los dispositivos móviles, tales como la agenda, los contactos y los editores de tonos de llamada.
A partir de ese momento, los usuarios ya no tenían que preocuparse por retener en sus cabezas los números de teléfono de sus familiares, amigos y conocidos, así como tampoco de no recordar las citas o reuniones programadas con anterioridad.
Y como si esto no fuera suficiente y gracias a la constante evolución de esta tecnología, tampoco había lugar para el aburrimiento, ya que surgieron los primeros juegos de arcade, a quienes nadie les roba protagonismo porque, se cree, fueron las primeras apps a las que se les otorgó un nombre y cuya popularidad aún se mantiene: nos referimos a los famosos juegos Tetris y Snake.
¿Cuál fue la razón que llevo al desarrollo de las primeras aplicaciones móviles de la historia?
Así como ha sucedido con muchos de los grandes inventos del ser humano, las primeras aplicaciones móviles surgieron con el objetivo principal de facilitar y optimizar los tiempos, especialmente en el campo laboral y con la pretensión de abordar los requerimientos de directivos y profesionales en cargos con alta carga laboral.
Sin embargo, debido a la gran ayuda que prestaron, no pasó mucho tiempo para que las aplicaciones móviles comenzar a incursionar en otro tipo de campos de acción, como por ejemplo el que se mencionó anteriormente: el ocio y el entretenimiento.
Todo ello se vio reforzado con el surgimiento de la tecnología WAP en el año 2000, la cual estandarizó las conexiones inalámbricas y permitió el acceso de los usuarios a versiones reducidas de la web. Empresas como Nokia, Sony o Motorola aprovecharon este avance y permitieron que los usuarios pudieran visibilizar el correo electrónico o algunas noticias desde su celular.
Empero, no fue sino hasta 2007 que las aplicaciones móviles alcanzaron el punto más revolucionario: con la presentación de iPhone, Apple dio vida a la primera tienda de aplicaciones. Un año más tarde, Google lanza el primer teléfono móvil con sistema operativo Android y su respectiva tienda.
Desde ese momento, todo cambió y el acceso a las apps se hizo cada vez más posible, ampliando el impacto de estas herramientas en diferentes áreas de la vida de los usuarios.
La actualidad de las aplicaciones móviles: En constante evolución
Ahora bien, desde la creación de la primera app de la historia el proceso no ha dejado de avanzar. Con cada día que pasa somos testigos de la aparición de herramientas cada vez más sofisticadas y eficientes cuyo objetivo actual es transformar la manera en la que abordamos nuestra vida y nuestras comunicaciones.
Ya las aplicaciones han dejado de ser programas simples con pocas funciones; por el contrario, en el mercado actual encontrarás apps para cualquier tipo de necesidad, con enfoques precisos que otorgan experiencias verdaderamente innovadoras a los usuarios, integrando, a su vez, otras tecnologías avanzadas, como la inteligencia artificial, la realidad virtual, entre otros.
No hay duda de que las aplicaciones son uno de los inventos más fantásticos y necesarios. Ellas son el ejemplo de que tenemos la capacidad de desarrollar las herramientas para satisfacer las necesidades, cada vez, más exigentes necesidades del mundo actual y de que podemos compaginarlas con otros avances tecnológicos ya existentes. Sin embargo, vale resaltar que aún sigue estando en tela de juicio el hecho de que pueden llevarnos a perder nuestra autonomía, nuestra creatividad y la capacidad para comunicarnos eficientemente sin ningún tipo de intermediario.
Y tú, ¿qué opinión tienes al respecto? ¡Queremos leerte!