Beber bebidas muy calientes como el café o el té puede ser una causa «probable» del cáncer, según la OMS. Se cree que las altas temperaturas en sustancias como las bebidas, pueden ser una de las grandes causas del cáncer del esófago. Un riesgo que aumenta en las bebidas con temperaturas superiores a 65 ° C. El anuncio se produce tras la revisión de más de 1.000 estudios científicos sobre la posible existencia de una relación entre el café y el cáncer, llevada a cabo por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer.
¡Atención! Las bebidas muy calientes podrían provocar cáncer
Christopher Wild, director de la agencia, dijo: «Estos resultados sugieren que el consumo de bebidas muy calientes es una causa probable de cáncer de esófago y que es la alta temperatura, más que las propias bebidas, la que parece ser la responsable.»
El café es la bebida caliente dominante en Europa. Pero los estudios realizados en lugares como China, la República Islámica del Irán, Turquía y América del Sur, donde el té o la yerba mate se beben tradicionalmente muy calientes (a aproximadamente 70ºC) encontraron que el riesgo de cáncer de esófago aumentaba con la temperatura, independientemente del contenido.
Así, tomar bebidas muy calientes se clasifica como «probablemente» cancerígenas para los seres humanos. En respuesta a los resultados, Casey Dunlop, oficial de información de salud en el Cancer Research UK, afirmó que: «La mayoría de la gente no consume bebidas en las temperaturas consideradas para la investigación, a pesar de que el té muy caliente es una bebida popular en Oriente Medio y otros países.»
Hay cierta evidencia de que el consumo de bebidas muy calientes, puede aumentar el riesgo de cáncer de esófago. Pero si dejas que tu bebida se enfríe un poco antes de beberla, es poco probable que el riesgo aumente.
Otros causantes
Por supuesto no es el único estudio realizado últimamente. También se han relacionado las dietas occidentales con un mayor riesgo de cáncer de colon y de próstata. Se encontró que los hombres que comen una dieta occidental tenían 2,5 veces más riesgo de morir de cáncer de próstata. Una dieta occidental se considera típicamente baja en fibra y alta en azúcares refinados, grasas saturadas y proteínas de origen animal.
Y aunque la presencia de las sustancias químicas tóxicas que estos alimentos o bebidas calientes pueden depositar en nuestros cuerpos, no significa necesariamente que tenga que causarnos daño, este informe detalla el asombroso número de carcinógenos a los que estamos expuestos. En un momento dado, algunas personas pueden albergar docenas o cientos de productos químicos que causan cáncer. Esta verdad preocupante pone de relieve la necesidad de una mayor conciencia de nuestra exposición diaria a los productos cancerígenos y la forma de evitarlos.
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