Una gota de mar es vida, y nunca mejor dicho. Seguro que también tú te habrás preguntado alguna vez qué hay en una sóla partícula de agua del océano, y puede también que en un acto de inmensa curiosidad o afán científico, ya lo hayas descubierto a través de un microscopio.
El fotógrafo David Littschwager es todo un experto en materia de fotografía natural. Trabaja habitualmente para el «National Geographic» y hace un tiempo su nombre dio la vuelta al mundo por una foto tan sencilla como fascinante: una simple gota de agua de mar ampliada lo suficiente, para hacer visible lo invisible.
Su imagen, consiguió evidenciar ante nuestros ojos ese microuniverso lleno de vida que se contiene en una simple lágrima salada de agua de mar.
¿Quieres descubrirla con nosotros?
¡Descubre todo lo que se esconde en un UNA GOTA AGUA DE MAR!
Para presentarnos esta «revoltosa» microfauna marina, David Littschwager cogió unas 15 pequeña gotitas de agua para colocarlas en una placa de Petri de 60 mm. Lo que vemos en realidad es una pequeña porción del total, una pequeñísima parte aumentada unas 25 veces para nuestro ojo humano.
Es un maravilloso cóctel de flora y fauna que en alguna ocasión nosotros mismos nos hemos tragado sin querer. Es vida, y es un universo paralelo al nuestro donde habitan millones y millones de organismos. Lejos de inquietarnos, lejos de producirnos miedo o repulsión, vale la pena conocerlos un poco más.
Te presentamos a unos pocos, poquísimos inquilinos que suelen «pulular» en esas pequeñas gotitas de agua de mar.
- Cianobacterias: son algas procariotas, un tipo de bacterias de color verde o azul y que miden sólo unos micrómetros (µm) de diámetro y que además, hacen la fotosíntesis: aportándonos oxígeno. A simple vista no son más que diminutos puntos verdes.
- Larvas de cangrejo: ¿Sorprendido? En una gota de agua pueden contenerse pequeñas crías de cualquier criatura marina, y las larvas de cangrejo suelen ser las más comunes. Miden poco más de 5 mm, y ya desde muy pequeños se pueden apreciar sus pinzas.
- Diatomeas: son las algas microscópicas más abundantes de los que componen ese alimento que tanto adoran las ballenas: el plancton. Las diatomeas son algas unicelulares cuya función es esencial y maravillosa para nuestro planeta: cerca del 40% de todo el oxígeno de la Tierra, nos lo ofrecen ellas.
- Copépodos: también son artrópodos, pequeños y de los cuales, hay hasta 12.000 especies. Los hay luminosos y habitan tanto en agua dulce o salada, de hecho, son el tipo de proteína más habitual para la mayoría de animales del océano. Como curiosidad te diremos que los científicos tienen la teoría de que si se juntaran todos los copépodos del mundo, representaría la más grande masa del planeta. Increíble ¿verdad?
Estos son pequeños ejemplos de todos esos fascinantes inquilinos que puedes descubrir si te animas a poner un poco de agua de mar bajo un microscopio. Ahora bien, en ocasiones, organismos diminutos se alzan como piezas esenciales de nuestro ecosistema, así que debemos verlos con admiración y respeto.
El mar, es una dimensión que representa la vida misma, y que debemos preservar. ¿Estás de acuerdo? Recuerda si te ha gustado este artículo, te animamos a descubrir :
Te encantarán.
Imagen: David Littschwager