Nikola Tesla fue uno de los científicos más importantes de la historia de la Tierra. Era un verdadero genio, él previó nuevas tecnologías mucho antes de su tiempo e ideó proyectos que todavía hoy nos dejan anonadados por su brillantez. Fue uno de los últimos científicos locos y merece mucho respeto y una habitación llena de libros de historia. Esta entrevista a Tesla es una de las muchas pruebas de ello.
¿Habías leído antes una entrevista a Tesla? Conoce al genio
Es triste ver a un científico como él que falta en los libros de historia de los niños de hoy en día. Es incluso peor que los historiadores y las escuelas hayan hecho pocos esfuerzos por cambiar esta situación, sabiendo que debemos tanto a la mente de este genio.
De niño, Tesla estaba fascinado con las tormentas y los rayos, tal vez debido al hecho de que en el día de su nacimiento, en la actual Croacia, una tormenta provocó el caos en el país. Tesla estaba tan fascinado con la electricidad que determinó que un día iba a aprovechar el poder del Universo en beneficio de todos los seres vivos. Por desgracia, hoy en día hay muy poco escrito sobre Tesla y por ello su legado merece mucha más importancia de la que se le ha dado.
En la búsqueda de datos sobre Tesla, nos encontramos con esta entrevista muy interesante, realizada en junio de 1915 por Samuel Cohen. En ella Cohen resume su encuentro con el juego mediante su testimonio y nos permite comprobar la importancia que tenía Tesla hace más de 100 años, cuando se le consideraba una verdadera estrella científica. El texto revela algunos detalles fascinantes.
El testimonio de Cohen presenta algunos de los maravillosos experimentos con corrientes alternas de muy alto potencial y muy alta frecuencia, que Tesla realizó en 1899. El Sr. Tesla explica que sufrió varios escapes durante la experimentación, causados por «bolas de fuego». ¡Apasionante!
También detalla que ete hombre extraordinario pasó una cantidad fabulosa de tiempo y dinero en el perfeccionamiento de su aparato para la transmisión de energía eléctrica sin la ayuda de ningún cable y presentó una serie de nuevos descubrimientos sorprendentes e invenciones en el campo eléctrico, que él no se preocupó en anunciar entonces, pues consideraba estas últimas de mayor importancia que cualquier trabajo de electricidad que había hecho hasta entonces.
Tenía la intención en un futuro próximo de transmitir de forma inalámbrica la voz y la energía por todo el mundo, desde su potentísima estación de onda eléctrica en Long Island, que estaba sin embargo aún sin completar entonces, pero que debía terminarse pronto. Tesla fue el primer inventor del motor de inducción y el sistema de transmisión de corriente alterna, popularmente conocido como bifásico, trifásico, o sistemas polifásicos, lo que creó una revolución en la ingeniería eléctrica y ahora universalmente adoptada.
Su trabajo más reciente en aquel instante era el descubrimiento de un nuevo principio mecánico que se plasmó en una gran variedad de máquinas, turbinas de vapor y de agua, transformadores mecánicos y transmisores de potencia, etc. Este principio permitió la producción de los primeros motores capaces de desarrollar diez caballos de fuerza, o incluso más, por cada libra de peso en la máquina. Su primer motor fue utilizado con éxito en la propulsión de los buques a velocidades extremadamente altas.
El tiempo asignado con el periodista se acorta, sin embargo, y el gran inventor dice adiós. El periodista termina afirmando maravillado: «Vive un centenar de años por delante de su tiempo.»
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