El 22 de marzo de 1999, Cynthia Vigil corrió sin una mísera prenda de ropa por un tramo solitario de una carretera, cerca de Albuquerque. Estaba cubierta de sangre, descalza, y alrededor del cuello llevaba un collar de metal grueso con una cadena colgando. ¿Te recuerda a Saw?
El asesino que pudo inspirar «Saw»
Cuando Vigil pasó junto a la carretera, los dos primeros conductores, asustados por su apariencia, no se detuvieron. No recibió ayuda hasta que dio con una caravana en la que sorprendió a una mujer viendo la televisión. Ella pidió ayuda, y la mujer llamó inmediatamente al 911.
Vigil confesó a la Policía, más tarde, que estaba trabajando como prostituta cuando fue recogida por un hombre -más tarde identificado como David Parker Ray. Este le ofreció una importante suma de dinero por mantener relaciones y, cuando ella aceptó, la apuntó con una pistola. La llevó a su propiedad, donde la ató y la obligó a ver la cinta de una mujer que era torturada sexualmente. La informó con frialdad que eso era exactamente lo que le iba a pasar a ella. Durante los días siguientes, Ray cumplió su despreciable palabra.
A partir de una vieja caravana, Ray había creado lo que él llamaba su «caja de juguetes», donde podía torturar a las mujeres con las que usaba una amplia variedad de instrumentos que pone los pelos de punta. Todo lo que ocurría en esa «caja» del horror era grabado en vídeo.
A pesar de que la policía era reacia a creer la historia de Vigil, tuvieron que tomar su versión de los hechos y heridas en serio cuando llegaron a la casa de Ray, y encontraron la caja de juguetes tal como lo había descrito. Ray fue puesto bajo custodia, y la propiedad desmontada para su examen. La verdad comenzó a salir a la luz.
Otra mujer, Angélica Montano declaró entonces que había sido sometida a una experiencia muy similar a la sufrida por Vigil. Como ella, Montano describió con precisión la caja de juguetes de la que había logrado escapar mediante uno de los juegos de Ray. No obstante, tras su fuga y contacto con la Policía, la autoridad había descartado dar seguimiento a su informe.
Trataron de encontrar a la mujer que Vigil había visto en la cinta y, finalmente, Kelly Garrett fue hallada en Colorado. Después de su experiencia con Ray, su vida se había venido abajo y se sentía a menudo confusa y asustada.
Tras interrogar a las tres mujeres, la policía se dio cuenta de que aún había otra persona más involucrada: Dennis Yancy. Cuando este amigo de Ray pasó a la sala de interrogatorios, el cuadro se puso más negro si cabe: Yancy describió haber ayudado a Ray a matar a varias personas. Además, mientras estaba bajo custodia policial, Ray describió más muertes, siendo una de ellas la de su ex socia de negocios.
El juicio de Ray, sin embargo, se prolongó más de lo esperado, pues el juez decidió que Ray fuese juzgado tres veces, por cada victima conocida. El primer juicio fue declarado nulo y tuvo que volver a ser juzgado, el segundo se retrasó indefinidamente cuando Angélica Montano murió.
Del juicio por Kelly Garrett salió sin condena, ya que un miembro del jurado dijo más tarde que no estaba claro si Garrett había dado su consentimiento a la forma en que era tratada en el vídeo. Aún así, la investigación siguió adelante.
Finalmente, se llegó a un acuerdo con el fiscal y Ray fue condenado a más de 200 años de prisión. Este asesino murió en la cárcel, cumpliendo pena. Aunque hay una amplia evidencia circunstancial de la presencia de otras víctima, hubo cuerpos que no fueron encontrados.
Otro de esos casos que nos estremece y nos hace ser conscientes de que, en muchas ocasiones, la realidad puede ser tan o más terrible que la ficción. Sin embargo, esta última a veces puede ser, lamentablemente, fuente de atrocidades como es el caso de los siguientes 5 asesinatos que inspiraron películas.
Imagen: Saw