La historia del hombre ha pasado por etapas que han marcado su desarrollo y cambiado el rumbo de su destino. Desde la prehistoria, con la invención de la rueda o el descubrimiento del fuego, la curiosidad humana no ha parado de trabajar. Con la llegada de la Primera Revolución Industrial, todos los aspectos de la vida sufrieron modificaciones enormes. El entorno social, económico y tecnológico empezó a avanzar a pasos agigantados, dando como resultado una industrialización de prácticamente todos los rubros. Con el tiempo, las maquinarias industriales no han parado de evolucionar. Como ejemplo, podemos citar modernos artefactos como la grúa torre, los motores o las turbinas de vapor y de gas, que han aportado al desarrollo y eficiencia de las más diversas actividades.
La aparición de la industria y sus maquinarias en el escenario mundial representó la más grande transformación vivida por el hombre desde la era Neolítica. Iniciando en Gran Bretaña en la segunda mitad del siglo XVIII, y extendiéndose a Europa y América hasta el año 1840, la Revolución Industrial marcó el paso de una economía rural a una industrializada y urbana. Los métodos de agricultura tradicionales fueron suplantados por tecnología, que además abarcaron otros rubros de manufactura. El resultado fue la multiplicación de resultados en un tiempo mucho menor, y con un uso más eficiente de los recursos. Las maquinarias industriales siguen siendo hasta hoy un pilar fundamental del desarrollo social. Acompáñanos a dar un paseo por su evolución más reciente.
Las máquinas industriales y su evolución
La Grúa Torre
Las ciudades modernas están repletas de construcciones que desbordan modernidad. De las casas simples de una planta, hemos pasado a la construcción de edificios y rascacielos alucinantes. Una de las máquinas industriales que ha transformado el sector de la construcción, es la grúa torre. Se trata de una máquina que tiene como función subir y distribuir cargas en el espacio, que son suspendidas mediante el uso de un gancho. Su estructura metálica es desmontable, y se alimenta por corriente eléctrica especial para el trabajo en construcción.
Se trata de una maquinaria industrial que ha evolucionado con el paso del tiempo. En primera instancia se hicieron grúas pequeñas, pero al ir las pretensiones arquitectónicas subiendo sus apuestas hacia edificios más altos, también se fue modificando esta maquinaria. Se incorporó el elemento de la polea, para que las grúas torre pudiesen elevar cargas de un mayor peso. También su funcionalidad evolucionó. De las grúas torre fijas, que no incorporan maniobras de movimiento en su operatividad, se crearon grúas móviles, con capacidad de movimiento autónomo.
También se desarrollaron otros tipos, como las grúas torre apoyadas, que centran su gravedad gracias a contrapesos que se sitúan en su base. Además, grúas empotradas que centran su gravedad en el suelo. Las grúas torre trepadoras, que se elevan con sistemas de trepado como cables o cremalleras, y finalmente las telescópicas, que se cuentan entre las más modernas y son capaces de elevarse sobre sí mismas, alargándose por tramos que están embebidos unos sobre otros.
El Motor
El formato del motor, tal como lo conocemos hoy, fue creado en el año 1886, por el alemán Nikolaus Otto. Se trató de un inventó revolucionario, que transformó la industria en los rubros más diversos. Aquel primer motor alemán era un dispositivo de combustión interna a cuatro tiempos. En definitiva, el motor es una de las máquinas industriales más versátiles y valoradas en el mundo moderno. Se trata de la parte sistemática de un dispositivo, que es capaz de poner en marcha el sistema, empleando algún tipo de energía, que puede ser eléctrica, de combustibles fósiles como la gasolina en el caso de los autos, entre otros.
La evolución de los motores ha sido fundamental para el crecimiento de la industria. Se ha llegado a la fabricación de motores térmicos, que trabajan en base a energía calórica, motores de combustión interna, motores de combustión externa o motores eléctricos. Cada uno tiene aplicaciones específicas. El motor es una de esas máquinas industriales imprescindibles, cuyos cambios van a la par del movimiento del mundo.
El Sistema Frigorífico
Uno de los inventos industriales que cambió la forma de vida fue el sistema frigorífico. Planteó un nuevo modelo de alimentación, en el que la comida podía ser mucho más duradera, y por tanto aumentarse el volumen y velocidad en la producción. También ha sido aplicado en industrias de todo tipo. El sistema frigorífico o de refrigeración se trata de un conjunto de arreglos mecánicos que hacen mano de las propiedades termodinámicas de la materia, para trasladar energía térmica en forma de calor, entre dos o más focos. En este sentido, su objetivo primordial es disminuir la temperatura del producto que se almacena, haciendo uso de cámaras frigoríficas.
El Compresor
Otra de las máquinas industriales que ha cambiado el rumbo de la industria, es el compresor. Se trata de una máquina térmica, cuyo objetivo es aumentar la presión de fluidos compresibles, como gases y vapores. Para su funcionamiento, el compresor genera un intercambio de energía entre la máquina y el fluido, aumentando la presión y disparando la fluidez de la sustancia. Esta, al igual que otras muchas máquinas industriales, han llevado a la sociedad moderna por los caminos de una evolución cada día más notoria y veloz.