Son muchos los avances y máquinas creadas por el hombre a lo largo del tiempo. Algunas aparecieron y fueron útiles por pocas décadas. Otras en cambio, fueron precursoras de un área del desarrollo humano, abriendo la puerta de un universo que jamás ha de cerrarse. Es el caso del séptimo arte, cuya expansión encuentra su origen en los inventos de los hermanos Lumière. Apasionados por la posibilidad de transmitir escenas cotidianas en una gran pantalla, estos hermanos inventores del cinematógrafo son los padres de ese arte que lleva más de un siglo divirtiéndonos, educándonos y llevándonos a la reflexión sobre los más variados temas.
Cuando hablamos del origen del cine, tal y como lo conocemos hoy, hay algunos nombres que vale la pena mencionar, como el de Alice Guy, la primera realizadora de cine narrativo, o el de Georges Méliès, el precursor del cine fantástico y de ciencia ficción. Pero sin lugar a dudas, los Lumière, hermanos inventores del cinematógrafo, son la primera y obligada referencia. Con la meta de hacer cine de demostración, estos franceses se dedicaron sin descanso al invento de maquinarias que les ayudaran a lograr su cometido. Acompáñanos en Supercurioso a descubrir los inventos de los hermanos Lumière, que dieron el paso inicial al desarrollo del cine.
Los inventos de los hermanos Lumière
1. La fotografía instantánea y las placas fotográficas (1881)
La fotografía instantánea ya existía cuando Louis Lumiére comenzó a experimentar con ella. El motivo por el que se incluye entre los inventos de los hermanos Lumiére, es por las nuevas funcionalidades que lograron en su experimentación. Con las cámaras, Louis tomó montones de imágenes, que detenía justo en el momento en que se estaban revelando. Así consiguió cientos de placas fotográficas con su nombre y el de la compañía de fotos familiar, fundada por su padre, Antoine Lumière.
Lo que hizo el joven Lumiére, que en ese entonces tenía sólo dieciséis años, fue poner a punto una placa seca, un método de fotografía instantánea que fue bautizado como Etiquette bleue. Fue luego de esta iniciativa que la empresa familiar, A. Lumière & ses fils, empezó a repuntar con la fabricación y comercialización de estas placas, convirtiéndose en una de las más importantes del sector de fotografía en el continente europeo.
2. El Cinematógrafo (1895)
Entre los inventos de los hermanos Lumiére para la concreción del sueño de crear el cine, ninguno fue tan relevante como el cinematógrafo. Auguste y Louis, siempre con el incentivo de su padre, empezaron en 1892 a trabajar en la posibilidad de fotografiar imágenes en movimiento. Hicieron progresos notables, pero para 1894 aún no daban con una versión definitiva. Es justo en ese año cuando Antoine es invitado a presenciar una demostración del kinetoscopio de Thomas Edison. El hombre llegó cargado de sorpresa, y motivando a sus hijos a que crearan un invento superador, que permitiera realmente hacer cine para un público, pues este aparato permitía ver sus proyecciones solo a través de una mirilla.
Es así como Auguste y Louis se convierten en los hermanos inventores del cinematógrafo Lumière, aparato que es patentado en el año 1895. Se trató de una caja de madera que, al proyectarse fijamente contra una pared, reproducía imágenes en movimiento, por medio de una película perforada de 35 milímetros que tardaban menos de un minuto. Este aparato permitió la proyección de la primera película en la historia de la humanidad, que llevó por título La salida de los obreros de la fábrica Lumière, en Lyon.
3. El Autocromo en color (1903)
Los hermanos inventores del cinematógrafo, fueron también quienes crearon un aparato de proyección y captura a color que fue el único en su estilo hasta el año 1937. Se tienen referencias de su creación en 1903, pero no fue patentado sino hasta 1907. El autocromo en color era una placa autocroma que captaba las imágenes a color. Su aparición fue revolucionaria en el mundo de la fotografía, y cambió totalmente el valor que la sociedad de la época daba a los retratos, como una forma de congelar su imagen para la posteridad.
Los hermanos Lumière, que se habían convertido en importantes personalidades de la época, utilizaban los eventos públicos a los que asistían para publicitar sus servicios fotográficos y sus cintas a través del afiche publicitario y los flayers de películas, elementos sobre los que también se les reconoce como precursores.
¿Quienes fueron los hermanos Lumière?
Antoine Lumière fue un hombre dado a las artes de la pintura, la canción, y posteriormente a la fotografía. Casado a los diecinueve años, se estableció en la ciudad de Besançon, Francia, en donde nacen sus dos primeros hijos. Auguste, en 1862, y Louis, en 1864. En 1870, huyendo de la amenaza Prusiana, la familia se establece en Lyon. En aquel momento nadie sospechó que los inventos de los hermanos Lumière darían lugar a la creación del cine. Sin embargo, al ser su padre el dueño de un estudio de fotografía en el centro de la ciudad, no resultó extraño que los jóvenes se involucraran y apasionaran por el mundo de las imágenes.
Desde la adolescencia empezaron a trabajar en el taller fotográfico de su padre. Auguste llevaba la administración del negocio, mientras que Louis ejercía labores de físico, logrando algunos procesos de mejora de las fotografías estáticas. Fue a partir de 1892 cuando se motivaron con la idea de la proyección de imágenes en movimiento, y sus esfuerzos se vieron materializados con la creación del cinematógrafo.
Cuentan los biógrafos e historiadores que se han dedicado al estudio de las vidas de los hermanos inventores del cinematógrafo, que las personalidades de ambos eran notoriamente distintas. Louis se tenía como un muchacho dado naturalmente al liderazgo, entusiasta y presto a la iniciativa y la acción. Era, de los dos, el más apasionado por el mundo de las imágenes. Su salud era frágil, y el padecimiento de jaquecas fuertes y frecuentes, le obligaban a faltar a clases con regularidad. Quedándose en casa, tuvo el tiempo de vincularse en mayor profundidad con las actividades de su padre, así como el desarrollo de algunas de sus aficiones favoritas, el dibujo y la música.
Por su parte, Auguste era un muchacho de carácter tímido y retraído, más parecido a su madre, la parisina Jeanne Josephine Costille. Ambos compartieron la pasión por las imágenes hasta dar con el cinematógrafo, el más destacado de los inventos de los hermanos Lumière. Luego de ello, tomaron rumbos profesionales distintos. Louis se mantuvo conectado al universo de las imágenes. Hizo muchas películas, y pasó siete años en el estudio de un método para generar fotografías a color, lo que finalmente logró, y consideró el gran logro de su carrera.
Auguste se separó de la fotografía y el cine, y dedicó su tiempo a cultivar otras áreas del saber, muy distintas. Se formó de manera autodidacta en biología y fisiología. Realizó estudios sobre diversas enfermedades como el cáncer, el tétanos y la tuberculosis. En 1914 inauguró un importante centro de investigación en Lyon, los Laboratoires Lumière. Incluían también una clínica en la que colaboraban los médicos más prestigiosos de la época.
La relación de los Lumière con el origen del cine
Los inventos de los hermanos Lumière los convirtieron en los padres y precursores del cine moderno. Todos los artefactos que han sido inventados para la producción y entretenimiento audiovisual, tienen al cinematógrafo Lumière como punto de partida. Pero el trabajo de estos inventores franceses no sólo se limitó a la proyección de películas, sino que fue mucho más allá. Algunos hitos del trabajo de Louis y Auguste Lumière, resultaron más que trascendentales para la construcción de lo que hoy entendemos como cine.
Las primeras películas
En primera instancia, ha de mencionarse la primera película de la historia, hecha por los hermanos inventores del cinematógrafo. Su primera exhibición en forma comercial se realizó el 22 de marzo de 1895, en la Sociedad Francesa de Fomento de la Industria Nacional. Su éxito fue absoluto, y marcó el inicio del cine como medio de entretenimiento. La película llevó por nombre La salida de los obreros de la fábrica Lumière, y se resumía a 46 segundos de una escena simple y cotidiana, en la que un grupo de trabajadores abandonaba la fábrica en la que trabajaban, luego de la jornada de trabajo diaria.
A pesar de tratarse el filme de la cotidianidad más simple, Louis Lumière hizo uso de su preparación artística en fotografía y dibujo, para encontrar las mejores selecciones de enfoque, de exposición, así como las fases esenciales del movimiento que reflejaría en los segundos de proyección. Dos meses más tarde, los inventos de los hermanos Lumière empezarían a consolidarse. El 10 de junio de 1895 fue presentado en el Congreso de Sociedades Fotográficas de Lyon, el filme La llegada de los congresistas a Neuville-sur-Saône, rodado el día anterior y que se considera el primer noticiero filmado.
El primer cine
Los hermanos inventores del cinematógrafo no detuvieron sus ambiciones en la creación del aparato y la filmación de las primeras películas. Luego del rotundo éxito obtenido con La salida de los obreros de la fábrica Lumière, alquilaron el Salon Indien, un espacioso local ubicado en los sótanos del Grand Café de París. Fue esa la primera sala de cine de la que se tiene registro en la historia. La proyección inaugural se realizó el 28 de diciembre de 1895, y la entrada tenía el valor de un franco.
En la inauguración se desarrolló un espectáculo de media hora, en el que se proyectaron las dos mejores películas de Louis Lumière, La llegada de un tren a la estación y El regador regado, así como otras diez películas más. El éxito fue tan abrumador, que tan sólo tres semanas más tarde, la asistencia diaria a la sala de cine alcanzaba unas tres mil personas, quedando así oficialmente iniciada la historia del cine, y los hermanos inventores del cinematógrafo, consagrados como sus grandes creadores. Si te cuentas entre los amantes del séptimo arte, no te pierdas esta selección de las mejores frases del cine, un mágico universo que llegó para quedarse.