México es un país con muchas pasiones, una de las más marcadas está en los casinos y los juegos de azar. Se trata de una industria que genera 7.500 millones de pesos al año. Ingresos muy superiores a otras industrias del mundo del entretenimiento, lo que habla de un país que gran porcentaje de su población prueba suerte de tanto en tanto en un casino. Aquí repasamos cómo llegamos a ser lo que somos hoy.
El “patolli” entretenía a los pueblos indígenas de México
Aunque tenía cierto sentido ceremonial y cultural, el Patolli o Patli era un juego de mesa en el que el azar tenía un papel principal. Similar a «serpientes y escaleras» o al «parchís», es un juego en el que hay que llegar de un punto «A» a un punto «B». En este caso, dar la vuelta a todo un tablero de 52 casillas.
Los teotihuacanos, toltecas, mayas y los mexicas usaban frijoles como dados y hacían apuestas finales y en cada ronda. A pesar de que se podía jugar solo entre 2 y 4 personas, se sabe que los espectadores también podían apostar.
Comida, vasijas, joyas y esclavos eran lo que más se acostumbraba a apostar en honor al dios Macuilxochitl Cinco Flor, deidad de la música y la danza.
Los españoles impusieron sus pasatiempos
Pero, el Patolli se acabó con la llegada de los españoles. Ellos lo consideraban pagano y peligroso para la estabilidad de la corona, pues no les gustaba la idea de que las personas pudiesen perder o ganar tanto dinero. A pesar de eso, a Moctezuma II le gustaba jugar a las cartas mientras estaba preso y se le estaba permitido jugar.
Además, como es bien sabido, a América llegaron españoles y europeos de las castas más bajas en los primeros viajes de Colón y los que le sucedieron, así que se impusieron los juegos de cartas más rudimentarios con el todo y nada como premisa.
Las clases más altas preferían la ruleta y el 21, juegos que se popularizaron en los primeros casinos de Europa por alrededor del año 1600 y que luego también llegaron a México.
A medida que se dejaron atrás las costumbres del oscurantismo y la ciencia impregnó la sociedad, juegos con mayor presencia de estrategia y matemática comenzaron a hacerse populares.
En 1770, se crea la Real Lotería General de la Nueva España para regular el juego, institución que sobrevivió el periodo de independencia debido a su efectividad en dar legalidad sobre los lugares de apuestas y las reglas del juego.
México, tierra prometida para los juegos de casino
Mucho se habla de la prohibición de alcohol en los Estados Unidos durante el siglo XX, pero poco se dice que la prohibición se extendió a los juegos de azar. Por eso, el presidente Porfirio Díaz expandió la cantidad de casas de juego en todo México, con especial énfasis en los estados del norte. Y a los meses comenzaron a llegar jugadores norteamericanos
Desde entonces el juego proliferó mucho más hasta que en 2004 el Presidente Vicente Fox aprobó la Nueva Ley General de Juegos y Sorteos que da forma a las normativas vigentes.
El gran cambio que se ha visto es en el juego en línea, una industria con una regulación no tan clara, pero que sabe sacar provecho de la realidad. Es que los mexicanos ya no van tanto al casino, sino que juegan desde su teléfono inteligente (sea Android o iPhone), con acceso a tragamonedas animadas, mesas de póker con jugadores de todo México y el mundo, así como muchos otros juegos.
Siendo México el país de habla hispana más poblado y también uno de los de mejor realidad económica, muchos casinos de renombre mundial quieren expandirse a los jugadores mexicanos.
Para saber más sobre la oferta de juegos de hoy, verificar OnlineCasino.mx y conoce las mejores plataformas legales en México. Mira cuál es su oferta de juegos, entérate de sus promociones y elige la que mejor se adapte a lo que buscas.