Los luchadores de sumo son principalmente conocidos por su tamaño, su chonmage (moño en su cabeza) y el mawashi (el taparrabos), que son las únicas prendas que utilizan en sus peleas. No obstante, la difícil y extraña vida de un luchador de sumo y las exigencias que debe cumplir para convertirse en un rikichi, palabra japonesa para definir al luchador de sumo. Y precisamente esta existencia repleta de sacrificios es en la cuestión que hoy queremos profundizar en Supercurioso. Quédate con nosotros y descubre su curioso día a día.
¿Cómo es la vida de un luchador de sumo?
1. Los inicios del Sumo y su evolución
Según muchos historiadores e investigadores de la historia de Japón y del sumo, este deporte comenzó en el período Kufun, cerca del siglo III d.C. En este momento, las peleas se anexaron a los rituales religiosos, y tenían por lo tanto un carácter sagrado. Estos enfrentamientos se llevaban a cabo en los templos (siendo la mayoría de ellos sintoístas, la religión oficial del país nipón), bajo la presencia de sacerdotes y participantes del rito.
Pero, ¿cómo y por qué este deporte perdió prácticamente por completo su carácter sagrado? Para encontrar una respuesta, debemos viajar al siglo XVII, cuando las peleas comenzaron a popularizarse y convertirse en un evento más bien deportivo. En muchas ocasiones, los enfrentamientos llegaron a convertirse en un modo de recaudar fondos que serían utilizados en la construcción de obras públicas. Actualmente, el luchador de sumo no es solo un profesional, sino toda una celebridad.
2. La vida de los luchadores de sumo y sus rutinas de entrenamiento
Si piensas que estos luchadores se entrenan como los occidentales, estás muy equivocado. El luchador de sumo no va al gimnasio después de salir de su casa, no sigue reglas de alimentación, ni es simplemente un personaje que come mucho y luego se empuja en un ring. Los luchadores de sumo viven en un recinto dedicado meramente a su entrenamiento, junto a otros rikishi. Estos lugares se llaman establos (heya), donde viven en constante preparación para le pelea y bajo un régimen que se confunde entre lo militar y lo religioso.
La rutina comienza muy temprano, en unos establos a las 5:30, en otros a las 7:00. Los luchadores de sumo se levanta directamente a pelear. El luchador de sumo no puede desayunar pues debe esperar hasta medio día para comer, después de haber peleado toda la mañana. Esto se hace así para hacer lento el metabolismo y ganar peso. Los jugadores tienen que ser completamente disciplinados con esto y con todas las otras exigencias; se dice que si no son disciplinados son sometidos a golpes como parte de su aprendizaje.
Después de pelear toda la mañana, su primer plato de comida contiene pescados, carnes y verduras: los jugadores de sumo deben ingerir más de 9.000 calorías diarias. Ingerida esta cantidad de comida, el jugador de sumo se acuesta a tener su primera siesta de 3 o 4 horas. Por su peso los jugadores tienden a tener problemas de respiración al dormir, por lo que utilizan máscaras de oxigeno. Más tarde, los jugadores de sumo se despiertan listos para su segundo entrenamiento y, en ocasiones, salen a la puerta del establo a firmar autógrafos para sus seguidores.
3. Algunas curiosidades relacionadas con el Sumo
1. Los chonmage atados en su cabeza simbolizan la antigua tradición de los Samurai, señalando su carácter guerrero, aunque el sumo haya sido desde sus inicios siempre un arte performático más que efectivamente de la guerra.
2. Aunque hay seis divisiones del deporte, que suman unos 650 luchadores profesionales de sumo, solamente 70 de estos hacen partes de las dos categorías principales del deporte. Ni siquiera estos 70 jugadores más reconocidos ganan la designación de yokozuna (gran campeón).
3. Ningún establo puede entrenar más de un luchador no japonés. A pesar de esto, Hakuhō Shō, un luchador de sumo mongol, es conocido como el mejor en la historia de este deporte milenario japonés.
4. Muchos jugadores de sumo son reclutados a los 15 años. Los jóvenes que quieren convertirse en jugadores de sumo buscan generalmente fama y dinero. Un luchador de sumo de las categorías principales tiene mucha fama y puede llegar a ganar unos 40.000 euros al mes.
Hasta aquí ha llegado nuestra entrada sobre la vida de un luchador de sumo. ¿Qué te parece la vida de estos luchadores de sumo? ¿ves diferencias entre este entrenamiento y aquellos de los deportes de combate occidentales? Esperamos poder leerte. 😉