Uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan las empresas, una vez que han sido constituidas, es lograr captar el primer cliente.
La compañía ya está preparada, la maquinaria está engrasada para ofrecer los productos o servicios, pero todavía nadie conoce la marca. Se trata de una dificultad de la que poco a poco se va surgiendo.
Independientemente de la calidad del producto, la tendencia del público es no comprar algo que no conocen y que ven por primera vez. Por este motivo, una de las principales recomendaciones es dar a conocer el producto entre los potenciales clientes, conseguir que lo recomienden y comenzar a fidelizar su preferencia.
El objetivo de todo emprendimiento es vender. No obstante, el solo hecho de la creación de la empresa no significa que haya sido una buena idea o que se ha dado en el clavo para atender una necesidad en particular.
Lo que hace funcionar a una compañía es que los compradores comiencen a cruzar la puerta principal y que hagan las primeras visitas en la página web.
Los emprendedores deben diseñar diferentes estrategias para que sus potenciales compradores conozcan, adquieran el producto o contraten el servicio que se ha ofrecido.
Definir una oferta
Un elemento clave para comenzar a recibir clientes es contar con una buena oferta, por lo que se debe conocer muy bien el producto, el mercado al que va dirigido, al usuario y a los competidores.
Al tener toda esta información, el emprendedor estará capacitado para diseñar una propuesta de valor que intente cubrir la necesidad. Una vez alcanzada esta fase, el siguiente paso es darse a conocer para que los consumidores comiencen a relacionarse con el producto.
En este punto se puede echar mano de las redes sociales y crear perfiles en plataformas como Facebook, Twitter o YouTube, para ir generando tráfico e interacción con la comunidad. Los expertos en la materia sugieren que, una vez identificados los clientes, hay que dirigirse directamente a ellos.
Es probable que los primeros usuarios que visitan el negocio se transformen en clientes. Para captarlos se deben aplicar promociones especiales con las que el emprendedor incentive y atraiga el interés de los potenciales compradores.
Contar con un portal web bien diseñado y con contenido de calidad es una forma de atrapar la atención de los usuarios que se interesen en contratar un servicio. Este es el lugar idóneo para dar a conocer los puntos fuertes de la marca y todos sus atributos.
Un ejemplo en el que se puede apreciar este tipo de estrategia es el de la página de Limpiezas Perfexya, que es una empresa de limpieza en Alcobendas que ofrece sus servicios de limpieza profesional de oficinas a través de su portal perfexya.com.
Aprovechar las relaciones personales
Una táctica que también puede generar buenos resultados es la de hacer uso de las relaciones personales. Es decir, si la marca está en pleno proceso de lanzamiento, lo ideal es reunirse con todos los contactos que puedan tener relación con la comunidad empresarial.
Al conseguir que estos recomienden la nueva marca, se podría ir tejiendo una red de contactos mucho más amplia. Una táctica que no tendrá mucho efecto sería enviar correos masivos o hacer llamadas en frío.
Los especialistas en marketing digital también sugieren que la presencia en la red debe ser fortalecida con el transcurso del tiempo. Esto quiere decir abrir nuevas secciones en el portal y actualizarlo de manera continua.
La estrategia va dirigida de esta forma porque cada vez es más habitual atender las necesidades de compra por Internet.
Este es el caso del sitio web laempresadelimpieza.com, una compañía de limpieza en plaza de castilla que da a conocer en su portal los servicios de mantenimiento, el suministro de productos higiénicos y la limpieza de oficinas en Madrid.
Al destacar el valor añadido del producto o servicio se le estará creando una personalidad propia. La misión es hablar de sus ventajas en comparación con lo que ofrece la competencia.
Al estar en contacto con los clientes, el emprendedor debe entender sus dudas y responder de forma concisa para transmitir una sensación de seguridad al cliente. Aquí la palabra clave es la preparación previa.
Para ilustrar lo que significa destacar el valor añadido de un producto, se puede citar el ejemplo de la página mejorcalidadprecio.com, un sitio en el que realizan comparativas para comprar online.
Los expertos analizan productos como las cajas de herramientas con ruedas y ofrecen su veredicto basándose en la relación MejorCalidadPrecio. Al finalizar, el personal destaca sus puntos fuertes o debilidades a la hora de comprar una caja de herramientas con ruedas como estas que están disponibles en el mercado.
Involucrarse con la comunidad
Para obtener mejores resultados, los emprendedores deben ser parte de la comunidad para que las personas puedan confiar y sentir seguridad para hacer negocios con la nueva compañía. La idea es ser un buen miembro y respaldar todos aquellos eventos que contribuyen al bienestar de todos.
Hay ocasiones en las que se promociona un producto que puede ser desconocido por la mayoría de las personas. En estos casos, es preciso utilizar todas las herramientas disponibles para darlo a conocer y tratar de abrir el mercado.
Un tema que está a la orden del día y que sirve para explicar la situación es el de las criptomonedas. Aunque la minería de Bitcoin es un fenómeno internacional, muchas personas desconocen de qué se trata.
Ante esta necesidad, hay portales como comoganardinero.pro, una página en la que se explica cómo ganar dinero con la minería de criptomonedas. Es una forma de aprovechar las ventajas de Internet para dar a conocer el funcionamiento de este tipo de monedas digitales.
Comenzar a facturar con un nuevo emprendimiento es un logro profesional para cualquier persona. Conseguir las primeras ventas requiere tiempo, esfuerzo y dedicación. Una vez que comiencen a llegar, la motivación estará en alza para generar nuevos servicios y aportar un valor añadido a los clientes.