Las películas de Ingmar Bergman formaron parte crucial de las carteleras de cine durante más de medio siglo, con sus tópicos de sueño y delirio, de lo onírico a tramas que tienen que ver con todo ser humano: la muerte, el dolor, el amor, siempre permeados por sus propios orígenes religiosos y su propia infancia. El guionista y director sueco pasó, sin duda, a la historia del séptimo arte con más de 40 filmes, razón por la que hoy en Supercurioso queremos rendirle el homenaje que se merece con una recopilación de los filmes indispensables que cualquier cinéfilo debería ver. ¡Descubre estas joyas del cine! (Y sigue reflexionando acerca de su valor con esta recopilación de Frases de Cine).
Las 5 Películas de Ingmar Bergman que todo cinéfilo debe ver
Es difícil escoger dentro de una carrera tan prolífera, igualada por pocos, y llena de referencias tan variadas como Buñuel, Francois Truffaut o Travkosky y otros tanto que almacenó en una videoteca con más de 1500 cartuchos para consumo personal, como el juguete preferido de el niño que convirtió a la gran pantalla en la expresión de su propio alter ego, el perpetuo rememorar aquellos años de la infancia, siempre presentes.
Hijo de un pastor luterano, Bergman nació en una familia muy estricta, donde los castigos estaban a la orden del día, del que encontró refugio en el cine y el teatro, aficiones que compartió con su hermana desde muy pequeño, por ser la cuna de esos mundos imaginarios que se inventaban. De esos ratos de juego, de esos escapes a un mundo alterno es que nos llegaron las películas de Ingmar Bergman, un retrato muchas veces doloroso de lo cotidiano, pero que, a veces, no siempre, encuentra refugio y armonía en cosas tan simples como una mirada o una caricia o cualquier otra minucia cercana a la vida misma. Es de ahí, de esos sentires, que traemos hoy cinco imprescindibles del director sueco.
1. Persona (1966)
Escrita y dirigida por el sueco, Persona es un drama que se adentra en los malestares psicológicos de los individuos, cuando una enfermera y su paciente se mudan a una cabaña y los límites de la propia identidad personal comienzan a resquebrajarse, poco a poco. Su estilo experimental está enfocado en confundir al espectador, como en un quiebre de Gaspar Noe, con juegos entre el humo y el espejo y rostros que se difuminan con el otro, que son dos y, a la vez, uno mismo.
Todo o casi todo se ha dicho ya sobre Persona, y sin embargo pareciera que todavía falta un universo de cosas por decir, razón por la cual se convierte en una de las películas de Ingmar Bergman que incuestionablemente debes saltar a ver.
2. El séptimo sello (1957)
Ambientada en Suecia, a mediados del siglo XIV, es una de las piezas fundamentales de Bergman, en las que un caballero, a la vuelta a tierra santa tras largos años de cruzadas, se toma con la muerte y, antes de partir, juega con la parca una partida de ajedrez en la que se debaten sobre cuestiones como la existencia de Dios, el sentido de la muerte y, como trasfondo, el propio sentido de la vida.
Es otro drama a profundidad, presentado en medio de conflictos religiosos y la devastación de la peste negra, en el que Bergman se adentra en los profundos temas del siglo, existencialismo de por medio, sin dejar de lado su pasado religioso.
3. Fresas Salvajes
Un médico de 78 años, que está por realizar un largo viaje para recibir un reconocimiento por sus años de labor, tiene en un sueño una premonición de su propia muerte en un accidente de tránsito, y a partir de entonces comienza a prepararse para recibirla.
Se embarca en el largo viaje, en el que destacan tomas gélidas, que se desarrolla un relato complejo, discusiones con su esposa que empieza a reprocharle errores pasados, y la evaluación exhaustiva de la propia dinámica de la vida, es esta otra de las películas de Ingmar Bergman en las que muestra todo su esplendor, otro de sus personajes complejos y, a la vez, extenuados de toda la complejidad, que se dirigen, sin temor, hacia la muerte. Otro gran debate sobre la vida.
4. Fanny y Alexander (1982)
Concebida originalmente como una película para televisión, dividida en cuatro partes y con una duración de más de 5 horas, fue estrenada primero en cines, con una versión de tres horas, y luego la versión larga fue también proyectada en el cine en una parte única. Ganó cuatro premios Oscar y recibió dos nominaciones más; el filme es todo un Decamerón del mundo del cine, aunque con una trama única, un poco menos experimental que los largometrajes anteriores, y que se extiende por varios años.
La trama va de una familia sueca que convive en una armonía estable, hasta que el padre de familia muere y la viuda decide casarse con un líder religioso conservador, decisión que le cambiará la vida no solo a ella, sino también a Fanny y Alexander, sus hijos.
5. El manantial de la doncella (1960)
Otra de sus películas ambientadas al final del medio evo, con conflictos religiosos y odios secretos, culpa y venganza. ¿No te ha quedado lo suficientemente claro? Pues no te diremos más, tendrás que ir a buscarla para que veas por qué es otra de las grandes películas de Ingmar Bergman.
Y sin con estos no se han calmado tus ansias de cinéfilo, te recomendamos frases de cine, para que rememores y te encuentres.