Según indican los estudios realizados por la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos, la mascota que elegimos dice mucho de nuestra forma de ser. ¡Estate atento porque lo que te contamos en este artículo, podría hacer que te conozcas un poco más a ti mismo!
¿Perro o gato? Una decisión que refleja tu personalidad
Todos sabemos que perros y gatos son diferentes. Mientras los primeros suelen tener un carácter leal, cariñoso y juguetón; los segundos suelen ser más independientes, un poco más esquivos y muy astutos. Así como los perros y los gatos son distintos, sus dueños también lo son.
En la investigación que dio lugar a estas afirmaciones, participaron más de 1.000 dueños de mascotas residentes en Estados Unidos. En la misma, tenían que contestar a un cuestionario e indicar qué tipo de animal doméstico tenían. Una vez que se analizaron las respuestas, la sorpresa fue mayúscula pues las diferencias entre las personas que tenían perros y gatos eran realmente notables.
Quienes tenían gatos…
Según se determinó mediante el análisis de las respuestas al cuestionario, quienes tenían gatos como mascotas eran personas creativas, a las que les gustaban las aventuras y también algo ansiosas.
Quienes tenían perros…
Por el contrario, las personas que tenían perros como mascotas solían ser personas extrovertidas y muy seguras de sí mismas pero a las que no les gustaba mucho correr riesgos.
También se señala que las personas con rasgos de trastornos de personalidad suelen ser mejores cuidando a sus mascotas, quizás por la dependencia emocional que suelen manifestar. Por otra parte, quienes cuidan a sus mascotas lo justo y necesario, se cree que pueden tener problemas a la hora de comprometerse y que tienen un carácter tranquilo e introvertido.
Quienes aman tanto a perros como a gatos…
Un 40% de las personas que participaron dijeron querer igual tanto a perros como a gatos y fueron justamente estas personas quienes demostraron tener una mayor capacidad para comprometerse en términos generales. El 19% de los participantes prefería gatos, el 38% perros y un 3 % únicamente afirmó que no le gustaba ninguno de los dos animales pese a tener mascota.
La cuestión está en el término medio. Cuidar poco a una mascota es realmente una irresponsabilidad, cuidarla demasiado, es quizás perderse otras muchas cosas de la vida o maleducarla. Lo ideal es darle a tu mascota los cuidados que se merece y también darte tú mismo espacios para compartir con tus amigos y las personas que quieres.
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