El negocio de las churrerías lleva años en buena forma. Se trata de un negocio que requiere poca inversión inicial, y cuyo éxito va a depender principalmente del producto que podamos ofrecer y de la capacidad para situar nuestra oferta en los lugares adecuados. Un barrio con demanda del producto o, si se trata de churrerías ambulantes, ferias, festivales o zonas de paso muy concurridas.
Por eso, lo habitual es que quienes deciden invertir sus ahorros en este negocio dediquen gran parte de su tiempo y su dinero a posicionarse en los lugares donde más rendimiento pueden obtener. Esto es absolutamente indispensable, pero para tener éxito en este negocio también se necesita tener el equipamiento adecuado.
Suele pensarse que en el negocio de las churrerías está todo inventado. No en vano, el churro es un clásico de nuestra gastronomía, ya sea como desayuno o como merienda con una chocolate caliente.
Las churrerías empezaron a aparecer en el siglo XIX, como la churrería madrileña San Ginés, que abrió en 1894, y un clásico de nuestro país. Aunque en realidad, podríamos decir que en cada ciudad hay al menos una churrería emblemática. De hecho, los churros es un producto estrella en nuestro país que poco a poco va extendiéndose también en el extranjero, como cuentan en este artículo.
La maquinaria necesaria para una churrería
Gran parte de la inversión inicial deberemos destinarla a adquirir la maquinaria necesaria para hacer los churros. Para adquirir este tipo de instrumental, lo mejor es visitar webs tiendas especializadas, como Inblan. Se trata de unos productos muy específicos que no encontrarás de venta al público.
En todo caso, la maquinaria necesaria será:
– Una amasadora, con la que te asegures de que la masa de harina, agua y sal es homogénea, lo que resultará en un producto óptimo.
– Una cesta metálica para depositar la masa y una pala para manipularla y removerla.
– Una dosificadora.
– Un fogón o freidora de potencia suficiente.
– Bandejas para escurrir, que eviten que el churro quede aceitoso.
– Palillos para colgar los churros.
Además, para cumplir con los requisitos de seguridad deberás garantizar la evacuación de humo, generalmente a través de un dispositivo conectado a chimeneas con filtros que deben estar separadas un mínimo de tres metros de la vivienda más cercana.
Además, si vas a montar un kiosco o una churrería ambulante será necesario que adquieras un vehículo o remolque para almacenar y transportar el producto y trabajar en él, homologado y con ventilación, compartimentos y maquinaria adaptada.
Tipos de freidora para una churrería
De todo el material que hemos mencionado más arriba, la freidora es el más determinante. A continuación, vamos a explicarte los tipos de freidoras industriales que existen en el mercado, y cuál es el modelo más adecuado para este negocio:
- Freidora industrial de gas: comprar freidoras de gas es, probablemente, lo que más se ajusta a las necesidades de los negocios ambulantes. Se colocan con facilidad (lo cual es una ventaja en un espacio reducido), consumen poca energía eléctrica, tienen un bajo coste energético y se calientan con rapidez.
De hecho, los principales fabricantes tienen como objetivo diseñar modelos que se adapten a los requerimientos de las churrerías ambulantes. Por ejemplo, la freidora a gas de Inblan ha sido diseñada para obtener un gran rendimiento de ahorro y energía. Esta freidora industrial a gas cuenta con un termostato digital para la graduación de dos temperaturas, de fritura y mantenimiento.
La instalación está realizada con cable anticalórico y la encimera tiene un diseño para el retroceso de aceite a la cuba, recubierta con aislante térmico. Para vaciar el aceite, estas freidoras industriales de gas cuentan con una válvula que facilita la operación.
Además, está equipada con ruedas para que sean más fáciles de colocar y transportar.
- Freidora industrial eléctrica: una de las grandes ventajas de las freidoras eléctricas es que mantienen y recuperan la temperatura de forma rápida. Generalmente disponen de un termostato de seguridad con limitador de temperatura y un sistema de protección de resistencias.
Actualmente existen nuevos modelos de freidoras eléctricas digitales, que se controlan mediante una pantalla táctil interactiva, desde la que se pueden programar hasta tres temperaturas de trabajo prácticamente sin desviación, lo que garantiza un producto perfecto.
Ahora bien, las freidoras eléctricas son recomendables para instalarlas en ubicaciones donde el suministro de energía no sea un inconveniente. Por ejemplo, locales fijos u obradores. En un punto móvil sin un suministro de energía eléctrica continuado y suficiente no cumplirían su función.
Otros aspectos a tener en cuenta: la importancia de cumplir la normativa
Como ocurre con cualquier negocio, antes de lanzarte a invertir debes asegurarte de qué normas debes cumplir. Lo recomendable es contar con el asesoramiento de profesionales que conozcan la normativa al detalle.
En el caso de las churrerías, debes contar al menos con un seguro de responsabilidad civil, que cubra posibles accidentes con la clientela. Los empleados que contrates deben tener el certificado de manipulador de alimentos. También deberás darte de alta en el Impuesto de Actividades Económicas, y constituir una sociedad o darte de alta como autónomo.
Por último, deberás obtener una licencia de actividad en el ayuntamiento.