Los productos instantáneos se han popularizado desde el año de 1958, cuando salió la primera sopa instantánea. Desde entonces se han desarrollado cada vez más productos de esta manera, sin lugar a dudas el cafe en cápsulas es ahora el producto instantáneo por excelencia.
¡Pero atención! Ahora le llega el turno a los refrescos.
Coca Cola ha comprado el 10% de la empresa Green Mountain Coffe Roasters, la cual es una de las mayores productoras de cápsulas de café. Además con la misma empresa se llegó a un acuerdo de colaboración de diez años para crear un sistema de gaseosa a base de cápsulas.
Esto abriría la posibilidad de “elaborar” nuestros refrescos instantáneos a partir de cápsulas de gaseosa y un “aparato” (parecido quizás a una cafetera) donde se introducen estas cápsulas. El administrador delegado de Green Mountain, Brian Kelly, ha comentado que: «podemos hacer con las bebidas frías lo que hemos hecho con el café o el té en casa. Creemos que es una oportunidad importante para acelerar el crecimiento del sector de los refrescos».
¿Para cuándo estará listo este método de comercialización de refrescos? Aproximadamente para el 2015.
Coca Cola está tratando de ser la pionera en esta nueva manera de disfrutar nuestras bebidas, aunque no es la única.
La empresa de origen israelí SodaStream también está trabajando en el mismo propósito. Ya comercializa un artefacto que al agua común le añade gas o añade sabor a la soda. De hecho filmó una campaña publicitaria con la atractiva Scarlett Johansson. El Spot publicitario estaba listo para ser transmitido hace algunos días en el Super Bowl pero no se transmitió. ¿Por qué? Algunos consideran que fue para no “estorbar” a los magnates de la industria, a saber, Coca-Cola y Pepsi.
Coca Cola ha anunciado sus planes para la elaboración de refrescos instantáneas y por lo que se deduce está dispuesta a ser la primera en hacerlo, a cualquier coste.
Para Coca Cola conseguir un sistema de venta por cápsulas le sería muy beneficioso, seguramente podrían venderlo a un precio parecido al de los refrescos y se ahorrarían el agua, transporte y producción.
Quizás ha llegado el momento de guardar una botella de nuestra bebida favorita antes de que desaparezcan completamente y solo se recuerde como una curiosidad. Solo el tiempo dirá si estamos ante un éxito o un fracaso.
Si estuviera esta máquina a tu alcance y a un precio razonable ¿Te la comprarías? Comparte con nosotros tu opinión