Si hoy te has levantado de mal humor sin saber muy bien por qué, no te preocupes tiene solución. ¡Te damos 8 formas de superar el mal humor!
8 formas de superar el mal humor
Al contrario de lo que se suele creer, las emociones sí se pueden controlar, aunque eso no significa que debas obligarte a ti mismo a estar feliz todo el tiempo, de hecho, esto podría ser contraproducente. Sin embargo, sí significa que puedes tomar decisiones para impulsar tu estado de ánimo cuando estás deprimido o de mal humor.
- Distracción – Si te pasas el día pensando en aquello que te ha puesto de mal humor, te vas a sentir peor. En este sentido, los expertos recomiendan distraerse haciendo algo que te guste como escuchando música, viendo una película o simplemente saliendo a caminar un rato para despejar la mente.
- Reevaluación – Intenta cambiar el punto de vista para modificar la manera en la que te sientes. Por ejemplo, si un amigo tuyo no para de hacerte preguntas molestas, piensa que realmente lo que le ocurre es que quiere que estés bien y que no lo hace con mala intención.
- Humor – ¿Qué sería de nosotros sin la risa? La risa crea cambios en tu cerebro y le da un impulso positivo a tu estado de ánimo de forma inmediata. Prueba a gastar una broma, a ver una comedia o a leer un chiste, seguro que te ayuda.
- Distanciamiento temporal – ¿Te acuerdas de las cosas que te preocupaban cuando eras adolescente? ¿A qué ahora sientes que eran ridículas? Lo que te preocupa ahora puede no tener importancia para tu yo futuro, dentro de 5 o 10 años ni siquiera recordarás que era lo que te había puesto de mal humor.
- Haz ejercicio – Cuando hacemos ejercicio liberamos hormonas que combaten el mal humor y que nos harán sentir más satisfechos con nosotros mismos. Además, estaremos distrayéndonos del problema, de manera que el efecto es doble
- Piensa en las cosas positivas – En vez de centrarte en lo negativo, piensa en todas las cosas buenas que tienes en tu vida y deja de darle importancia a lo malo.
- Desahógate – No hay nada mejor que llamar a un amigo y contarle todo aquello que nos ronda la cabeza. Una vez que hayas expresado tus pensamientos en voz alta, te darás cuenta de que no eran tan trascendentales como creías.
- Cambia de entorno – Si nada de lo anterior funciona, es el momento de tomar decisiones más drásticas. Ten en cuenta que si no eres feliz no tiene sentido seguir haciendo lo mismo, así que plantéate cambiar de trabajo o mudarte a una nueva ciudad. Incluso, a veces, modificando pequeñas conductas cotidianas podrás conseguir el mismo efecto, como por ejemplo, alejándote de ese compañero de trabajo que te transmite energía negativa.
Y si tu mal humor está conectado con tu estómago, no te pierdas “8 alimentos más que te ponen de buen humor”.