Está demostrado que el vínculo que existe entre una persona y su perro es una de las relaciones más especiales que existe. El amor y el cariño que demostramos a nuestra mascota es importantísimo para que tenga un buen desarrollo y crecimiento. El lenguaje con el que nos dirigimos a él es esencial para crear ese vinculo especial entre vosotros. Dedícale una sonrisa a tu perro y verás su reacción.
Si en algún momento de tu vida has tenido perro, sabrás que realmente ellos son capaces de percibir como nos sentimos de ánimo, si estamos contentos o tristes o, incluso son capaces de saber si necesitas que te animen jugando contigo o si prefieres que se tumben tranquilamente a tu lado para darte serenidad y calma.
Una sonrisa a tu perro y te declarará amor eterno
Esta relación tan especial entre humanos y perros ha sido estudiada por la ciencia durante años y establece que existe un vínculo emocional entre personas y mascotas. Así que está demostrado, tu perro puede percibir cómo te sientes.
¡Reconócelo! Cada vez que preguntas a tu perro: ¿quieres ir a pasear? ¿Te apetece salir un ratito? Lo haces como si te dirigieras a un niño pequeño, con un tono muy condescendiente, incluso algo cursi.
¿Qué siente cuando le dedicas una sonrisa a tu perro?
Un estudio publicado por investigadores de Brasil y Reino Unido en Biology Letters en enero de 2016 estableció que tu perro reconoce tu entusiasmo cuando empleas ese tono cursi e incluso cuando dedicas una sonrisa a tu perro. Según este estudio, los perros pueden detectar las emociones de otros perros e incluso las de los humanos. Esta es un proeza que jamás habíamos detectado en otra especie animal fuera del hombre, y eso les da una gran ventaja a nuestros amigos peludos.
En ese estudio utilizaron imágenes tanto de personas como de otros perros que expresaban un gran abanico de emociones. Añadieron además a estas imágenes, vocalizaciones y ruidos positivos, negativos y neutros tipo ladridos de enfado o de felicidad. También agregaron voces de humanos, que eran desconocidos para el perro, y que hablaban tanto de manera alegre como enfadada y además lo hacían en portugués ya que era el único idioma que ninguno de los perros del estudio había escuchado nunca.
Los perros fijaron su atención en aquellas imágenes cuyo sonido coincidía con la emoción que expresaban. El hecho de ser capaz de mezclar diferentes estímulos, tanto visuales como auditivos, es algo que pertenece a talento cognitivo de nivel superior.
Otro estudio realizado en marzo de 2018 en la Universidad Nacional Autónoma de México analizó lo que pasaba en un perro cuando reconocía una emoción. Para poder observar los mecanismos neuronales, los investigadores de dicho estudio entrenaron a 8 perros para permanecer quietos mientras les hacían un escáner de resonancia magnética y entonces les enseñaron fotografías de personas con expresiones felices y neutrales. Se dieron cuenta de que cuando les mostraban fotos de personas sonriendo, se reflejaba una mayor actividad cerebral en la corteza temporal de los perros. ¿La conclusión? Una cara humana feliz desencadena una firma en el cerebro del perro que es diferente a cualquier otra emoción.
Dicho patrón de felicidad era tan diferente que un programa de aprendizaje automático podía usar la actividad cerebral de la mascota para poder saber cuándo concretamente estaba observando a una persona feliz.
Según otro estudio realizado, esta vez en la Universidad de York, la mejor manera que tenemos los humanos de comunicarnos con nuestras mascotas es a través del «lenguaje canino», que es un lenguaje parecido al que utilizamos para dirigirnos a un bebé. Hicieron un experimento con un grupo de personas junto a sus mascotas. Propusieron a la mitad de ellos que hablaran a sus perros como si fueran bebes. La otra mitad, en cambio debía hablar a su mascota de manera más natural. Después de observarlos durante un tiempo comprobaron que cuando la persona que se dirigía a su perro con voz aguda y con una emoción exagerada, igual que hacemos los adultos cuando nos dirigimos a un bebé, mejoraba considerablemente la atención de la mascota, lo que quería decir que se establecía un mejor vínculo social entre ellos.
Más estudios sobre el tema…
Otro estudio similar a este y que fue publicado en la revista Preoceedings of the Royal Society B, llegó a la misma conclusión; los perros tienen la capacidad de comprender la comunicación humana como ninguna otra especie animal, pero siempre hay que tener en cuenta unos parámetros concretos para que esta comunicación sea posible. Los investigadores han concluido que, si queremos tener la atención de nuestro amigo peludo, debemos cambiar la estructura de las frases haciéndolas más cortas y además deberemos aplicar un tono de voz más agudo.
Lo que se extrae de todas estas investigaciones es que los perros tienen habilidades y comportamientos perfectamente compatibles con la vida de los seres humanos, de ahí que tengamos unos lazos tan estrechos.