Las religiones antiguas tienen historias que hablan de la vida de los dioses. Esos mitos se crearon para dar respuesta a fenómenos y circunstancias que para nuestros ancestros eran inexplicables. En Supercurioso hemos visto como los griegos explicaron la existencia del Eco basándose en el mito de una ninfa y en esta ocasión queremos acercarnos a Xipe Tótec que fue un dios que compartieron varias mitologías precolombinas. Lo encontramos en la mitología azteca, la zapotec y la yopi. Xipe Tótec era el dios del Este, del lugar por donde sale el Sol, y además representaba la renovación y el desprendimiento de todo aquello que ya no es útil. Acompáñanos a conocer la leyenda de Xipe Tótec y los sacrificios por desollamiento. ¡Horroroso!
La leyenda de Xipe Tótec
En la mitología azteca el mundo fue divido entre 4 dioses hijos de una pareja primigenia siguiendo los cuatro puntos cardinales. Entre estos cuatro importantes dioses se encontraba Xipe Tótec dominando el Este. Era el patrón de los artesanos, la danza, la agricultura, el maíz tierno, la fertilidad y el amor, la riqueza, los sacrificios, la curación y, en general, la parte masculina del universo. También presidía los ritos de iniciación de los guerreros.
Su nombre significaba literalmente «nuestro señor el desollado» y se le representaba cubierto con una piel humana desollada que significaba la renovación y el renacimiento. Esta forma de presentarlo obedecía a la leyenda de Xipe Tótec. El mito de Xipe Tótec cuenta que este dios se despellejó vivo para ofrecer su primera comida a los hombres. En los inicios de la humanidad no había nada para comer y Xipe Tótec se sacrificó a sí mismo para conseguir alimentos. Se arrancó los ojos y se desolló vivo para que el grano de maíz pudiera germinar. Este hecho parece tener su paralelismo en el hecho de que las semillas maíz pierden su capa externa antes de germinar y servir de alimento. También se lo relacionaba con las serpientes, ya que estas pierden su piel para regenerarse y de alguna manera se asoció esta renovación cutánea con la curación de algunas enfermedades que se atribuye a Xipe Tópec.
Los sacrificios por desollamiento
La fiesta o festival anual en honor de Xipe Tótec se celebraba en el equinoccio de primavera antes de la llegada de las lluvias y se llamaba «Tlacaxipehualizti». El sacrificio principal era un tributo a su entrega a los hombres; como él se había desollado para proporcionar alimento a los humanos, se elegían víctimas entre los esclavos capturados en las guerras contra los pueblos vecinos y se las desollaba vivas. Algunos historiadores afirman que primero se les arrancaba el corazón y luego la piel. La creencia era que esta acción proporcionaría felicidad, buenas cosechas y además la curación de determinadas dolencias como la viruela, los problemas oculares o diferentes dermatosis. Los afectados por estas enfermedades se cubrían con la piel desollada de uno de los sacrificados.
Esa piel desollada simbolizaba también la «piel nueva» que cubriría y cambiaría la tierra al llegar la primavera. Curiosamente los aztecas creían que era un gran honor se desollado para el dios y elegían a los mejores guerreros cautivos y los preparaban durante días para ser sacrificados.
Otros sacrificios humanos dedicados al dios Xipe Tótec
Además de las víctimas del desollamiento, algunos prisioneros/esclavos eran elegidos para enfrentarse a un combate ritual con los guerreros del pueblo. Este combate desigual se conoce como «lucha de gladiadores». Al esclavo se ataba a una piedra ritual, se le daban armas simuladas y debía enfrentarse al guerrero que luchaba con armamento real. Representaba el combate entre el invierno y la primavera, en la que esta última siempre sale vencedora.
El último de los sacrificios humanos dedicados a esta divinidad fue el asaetamiento. Las pieles desolladas, al cabo de unos 20 días aproximadamente, se arrojaban a una especie de cámara en la que los historiadores creen que se encontraba la Piedra del Sol.
Junto a ella, atados con los brazos en cruz, se situaba un numero indeterminados de esclavos a los que se disparaban flechas de manera que la sangre que manaba de las heridas cayera donde estaban los pellejos humanos. La sangre simbolizaba la lluvia de primavera sobre los campos, tan necesaria para obtener una buena cosecha.
Atributos de Xipe Tótec
Además de la piel humana desollada, que solía pintarse de amarillo en las representaciones del dios, entre los atributos más comunes se encontraba el sonajero para llamar a la lluvia y la serpiente porque muda la piel. Vestía una capa y un sombrero a rayas de colores con borlas y en las manos portaba una especie de cetro conteniendo la semilla. Para hacer más realista el hecho de que está cubierto por una piel humana, a la altura de las muñecas se plasmaban unas manos desmayadas y sin vida que representaban la epidermis de las extremidades del desollado.
Los aztecas no fueron los únicos que adoraron al dios Xipe Tótec, sino que también los Mexicas lo adoptaron como uno de los suyos durante el gobierno del emperador Axayáctl. ¿Concias a Xipe Tótec? ¿Sabías que se le ofrecían este tipo de sacrificios humanos? Si tienes más datos sobre este dios, ¡compártelos con nosotros!