Últimamente se habla mucho sobre la inteligencia emocional y como mejorarla pero debes saber que mejorar tu inteligencia emocional no quiere decir que te ayude a aprobar todos los exámenes que tengas de ahora en adelante, pero lo que si que hará será convertirte en un adulto funcional, comprensivo y bien adaptado.
¿Quieres saber porqué es importante mejorar tu inteligencia emocional?
La IE, como se la conoce, es la capacidad de identificar y administrar las emociones propias y las emociones de los demás. Las emociones son muchas y muy variadas así que si lo único que conoces es “triste”, “feliz” y “enfadado” prepárate porque te traemos un curso intensivo sobre IE, donde descubrirás nuevas sensaciones y podrás poner nombre a muchos sentimientos.
¿Qué es la Inteligencia emocional?
La IE es la hermana infravalorada y marginada, y poco entendida, del CI (cociente intelectual). Hasta hace poco, el CI eclipsaba cualquier otro tipo de inteligencia y se entendía que esta era la única inteligencia con valor, nada más lejos de la realidad. De ahí la importancia de mejorar tu inteligencia emocional.
En realidad, a día de hoy, la IE es una de las habilidades que ayuda a un mayor y más rápido crecimiento en el trabajo. No en vano, los responsables de Recursos Humanos la valoran más que al CI. Y en 2020 se estima que será una de las 10 mejores habilidades laborales.
Pero, ¿en qué favorece tener una personal con alta IE en tu empresa? Las personas con alta IE entienden y simpatizan mejor con los demás, repercutiendo en hacerles mejores personas, son mejores para los trabajos en equipo y suelen ser mucho más reflexivos que la media. Así que mejorar tu inteligencia emocional puede ayudarte en tu trabajo.
Sabiendo todo eso, es lógico pensar que mejorar tu inteligencia emocional es algo que te conviene, aunque suponga salir de tu zona de confort.
Veamos en que consiste la inteligencia emocional
Hasta hace bien poco, se creía que cualquier emoción podía “clasificarse” en alguno de los 6 grandes grupos de emociones; felicidad, tristeza, enojo, sorpresa, miedo y disgusto.
Algo que queda bastante pobre según un estudio realizado en 2017 por investigadores de la Universidad de California en Berkeley. Ellos identificaron 27 emociones distintas, en lugar de las 6 básicas. Esas emociones son: diversión, torpeza, adoración, admiración, alegría, asombro, anhelo, apreciación estética, calma, entrada, nostalgia, confusión, ansiedad, miedo, horror, disgusto, deseo sexual, romance, ira, dolor, tristeza, sorpresa, alivio, emoción, interés, satisfacción y aburrimiento. ¿Qué te parece? Si piensas ahora en la película Del Revés, parece que se quedó corta, ¿no?
Ahora puede parecer más fácil entender el significado de la Inteligencia emocional y como puede ayudarnos a crecer como personas. Así que te explicamos de que manera podemos mejorar tu inteligencia emocional. Según Lisa Barrett, neurocientífica y psicóloga, existen tres pasos para que puedas aumentar tu IE y lo explica en su libro: Cómo se hacen las emociones: la vida secreta del cerebro. Aquí tienes algunos de los datos más importantes.
- Reconocer un amplio abanico de emociones. Esto es algo que Barrett llama «granularidad emocional». Si todo lo que eres capaz de identificar es «feliz» y «triste», todo lo que serás capaz de sentir será felicidad o tristeza. Una vez que identifiques esas 27 emociones de las que te hablábamos empezarás a explorar la granularidad de tus sentimientos. En palabras de Barrett, «tu cerebro tendría muchas más opciones para predecir, categorizar y percibir la emoción, proporcionándote las herramientas para respuestas más flexibles y funcionales».
- Aprende nuevas palabras para emociones específicas. ¿Sabías que los noruegos tienen una palabra para la alegría intensa de enamorarse? Es el término «forelsket». No se trata de inventar palabras porque sí, sino de diferenciar sentimientos. Como ejemplo, ¿igualarías los sentimientos de «arrepentirse» con «dolor de corazón»? Seguramente que no. Si tienes claro que no es el mismo sentimiento, ¿Por qué los incluimos los dos bajo la “tristeza”? Deberían respetarse sus diferencias y matices. Así que una vez que aprendas palabras nuevas para definir emociones específicas, podrás seguir expandiendo esa granulidad emocional.
Barrett escribe: «Probablemente nunca pensaste en aprender palabras como un camino hacia una mayor salud emocional. Las palabras aumentan tus conceptos, los conceptos impulsan tus predicciones, las predicciones regulan las sensaciones de tu cuerpo y tu cuerpo, en definitiva, determina como te sentirás. Así que, cuanto más amplio sea tu vocabulario, más exactamente tu cerebro predictor podrá calibrar tu sensaciones y entender cuales son tus necesidades. De hecho, las personas que exhiben mayor granularidad emocional acuden al médico con menos frecuencia, y pasan menos días hospitalizados por enfermedad».
- Crea nuevas emociones. La IE no es una ciencia cerrada. Eso quiere decir que si no encuentras una palabra específica para describir un sentimiento, puedes inventarla, eso te ayudará a hacerlo real y a clasificarlo, lo que ayudará a expandir de nuevo tu granulidad emocional, y ya hemos hablado de lo importante que resulta eso.
Lo verdaderamente importante es aprender a escucharse uno mismo, no hay diccionario más extenso que tu propio cuerpo.
¿Qué te ha parecido nuestro artículo sobre como mejorar tu inteligencia emocional? ¿La cultivas? Explícanos tu punto de vista ¡Estaremos encantados de leerte!