No es sencillo pensar en epitafios bonitos para adornar nuestra tumba, aunque es algo bastante importante que tendríamos que tener en cuenta. Con un epitafio, la gente que nos conozca se acordará de nosotros cada vez que visite nuestra tumba, y los que pasen por el cementerio, también.
Por eso, está bien pensar en epitafios bonitos que no sean negativos, o que, incluso, sean graciosos. Al fin y al cabo, si nos podemos tomar la vida a broma, también tendríamos que hacerlo con la muerte, y dejarles a nuestros sucesores una razón para acordarse de nosotros con un bonito recuerdo.
50 Epitafios bonitos y memorables | Las lápidas más emocionantes
1. Y así seguimos empujando, botes contra corriente, atraídos incesantemente hacia el pasado. – En la tumba de Francis Scott Fitzgerald
2. Allí donde ella estaba, era el Edén.
3. Esto es lo que le pasa a los chicos malos. – Alfred Hitchcock
4. Aquí están nuestros huesos aguardando por los vuestros.
5. Si no viví más, fue por que no me dio tiempo. – Marqués de Sade
6. Nos has hecho para ti Señor y nuestro corazón estará insatisfecho hasta que descanse en ti. – Epitafio de San Agustín
7. Intentad dejar este mundo un poco mejor de como os lo encontrasteis. – Robert Baden-Powell
8. Méteme, Padre eterno, en tu pecho, / misterioso hogar. / Dormiré allí, pues vengo deshecho / del duro bregar. – Miguel de Unamuno
9. Las lágrimas más tristes que se lloran sobre las tumbas son por las palabras que nunca se dijeron.
10. Aquí yace Molière, el rey de los actores. En estos momentos hace de muerto y de verdad que lo hace bien. – Molière
11. Parece que se ha ido, pero no se ha ido. – Cantinflas
12. Es más digno que los hombres aprendan a morir que a matar. – Séneca
13. Buen amigo, por Jesús, abstente de cavar el polvo aquí encerrado. Bendito el hombre que respete estas piedras, y maldito el que remueva mis huesos. – William Shakespeare
14. Hemos amado con demasiado fervor a las estrellas como para temer a la noche.
15. Yace aquí en alguna parte. – Werner Heisenberg
16. Los soles se ocultan y pueden aparecer de nuevo pero cuando nuestra efímera luz se esconde, la noche es para siempre y el sueño, eterno. – Cayo Valerio Catulo
17. Mi viaje acaba aquí. Piensa, mortal, quienquiera que tú fueres, que fui lo que tú eres. No hay edad prefijada; tal vez seas hoy lo que yo soy. No te importe mi nombre, tan siquiera, yace aquí quien te espera.
18. Duerme. La suerte persiguiole ruda; murió al perder la prenda de su alma. Larga la expiación, la pena aguda fue; y así obtuvo la celeste palma. – Jean Valjean, al final de Los miserables
19. Nos vemos muy pronto, niños.
20. Aquí yace un valiente, un temible adversario y un hombre de honor. Descanse en paz. – Manfred von Richthofen
Seguimos con más epitafios bonitos que hacen que nos vibre el corazón.
21. Asesinado por un cobarde y traidor cuyo nombre no merece figurar aquí. – Jesse James
22. No lloréis porque me voy. Llorad porque no volveré. – José Luis Voltas
23. Aquí yace uno cuyo nombre fue escrito en agua. – John Keats
24. Nos acordaremos, de este planeta. – Leonardo Sciascia
25. No lo intentes. – Epitafio de Charles Bukowski
26. Realmente estoy agradecido; hay a quienes la vida les negó todo, y a mí, de todo aquello que te hace ser, sentir, disfrutar, tener, me dio cuando menos, doble. – Flaco Meraz
27. Amigos míos, pensad que duermo.
28. Permanece triste y en pie junto a la estela del fallecido Kroisos, luchador de primera línea a quien el impetuoso Ares ha arrebatado.
29. Soy escritor, pero nadie es perfecto. – Billy Wilder
30. Abrid esta tumba: al fondo se ve el mar. – Vicente Huidobro
31. No envidiéis la paz de los muertos. – Nostradamus
32. No son muertos los que yacen en la tumba fría, muertos son los que tienen el alma muerta y viven todavía.
33. Oh, Madre Uut! ¡Extiende sobre mí tus alas como las estrellas eternas! – Tutankamón
34. Fiel a su propio espíritu. – Jim Morrison
35. Tú también estás en la cola, lo único es que no sabes cuánto te falta.
36. … Y pasaron como sombras; como viajeros que van en posta.
37. El silencio es música.
38. El cielo estrellado sobre mí, la ley moral en mí.
39. Odiado por sus enemigos y temido por sus amigos. – Cayo Mario
40. Aquí acaban todas las vanidades del mundo.
41. …Y no tengan miedo. – Jorge Luis Borges
42. He nevado tanto para que duermas.
43. Serás lo que soy.
44. Lo que el alma hace por su cuerpo es lo que el artista hace por su pueblo. – Gabriela Mistral
45. El último que apague la luz.
46. Aquí descansa él y en casa descansamos todos.
47. Volveré y seré millones. – Tupak Katari, líder aimara
48. Aquí yace el cuerpo de B. Franklin, Impresor. Como las tapas de un libro viejo, su contenido arrancado y despojado de sus títulos y adornos. Mas la obra no se perderá; pues como creyó, aparecerá de nuevo en una edición nueva y más elegante, corregida y mejorada por el Autor. – Escrito por Benjamin Franklin cuando tenía 22 años
49. Diles a los espartanos, viajero que pasas por aquí, que obedientes a sus leyes, aquí yacemos. – Epitafio de los espartanos que murieron en la batalla de Termópilas
50. Conocí el bien y el mal, pecado y virtud, justicia e infamia; juzgué y fui juzgado, pasé por el nacimiento y la muerte, por la alegría y el dolor, el cielo y el infierno; y al fin reconocí que yo estoy en todo y todo está en mí. – Hazrat Inayat Khan
Esperamos que te haya gustado este artículo sobre epitafios bonitos, y que hayas conseguido inspirarte para alguno o que, al menos, te hayan parecido curiosos. Y tú, ¿tienes algún epitafio pensado para tu tumba? ¿Cómo te gustaría que te recordaran? ¡Recuerda que puedes contárnoslo en los comentarios! ¡Nos encantará leerte! Y si conoces más epitafios bonitos, ¡compártelos también!