Esta es una pregunta que cada vez se plantea más entre los científicos y los pescadores que trabajan en la costa cantábrica. Y es que en los últimos años los arrastreros que faenan en la costa Cantábrica han capturado unos 30 kraken o calamares gigantes, siendo -junto con Nueva Zelanda- una de las zonas del mundo donde se han encontrado más ejemplares de estos espectaculares e increíbles animales. Un hecho que ha puesto a los investigadores a analizar las condiciones que pueden propiciar que los kraken habiten en las aguas cantábricas.
Pero, ¿qué es un kraken?
Con el nombre de Kraken se conocía a unas criaturas marinas de la mitología escandinava y noruega. Unos seres con forma de grandes pulpos o calamares que atacaban a los barcos y devoraban a los marineros, aunque otras leyendas afirmaban que los kraken arrastraban el barco y su tripulación al fondo con la fuerza de sus tentáculos sin que nadie pudiese escapar. Tras estas historias parece haber tanto fenómenos naturales asociados al vulcanismo submarino de zonas como Islandia, como avistamientos de calamares gigantes, pulpos e incluso grandes ballenas. Con el tiempo fue ganando fuerza el relacionar el kraken con los calamares gigantes que se han ido capturando. Así, Julio Verne incluyó en su famosa novela Veinte mil leguas de viaje submarino referencias al kraken y al ataque de uno de ellos al Nautilus y ha sido frecuente la aparición de este fantástico y legendario animal en sagas cinematográficas tan populares como «Los Piratas del Caribe».
Las investigaciones científicas nos van acercando más a las costumbres y comportamientos reales de este sorprendente animal.
Los kraken capturados en el Cantábrico
A finales de noviembre de 2015 tuvo lugar la última captura de un kraken entre las costas de Asturias y Lugo. Un arrastrero gallego encontraba en sus redes un calamar gigante de más de 10 metros de largo, incluyendo los tentáculos, y unos 150 kilos de peso. Un ejemplar que vendría a sumarse a los alrededor de 30 que han aparecido en los últimos años frente a las costas de Asturias, Cantabria y Galicia. Este espécimen, una hembra, se ha congelado para su posterior estudio y exposición al público en el Museo del Calamar Gigante, Cepesma, ubicado en la localidad asturiana de Luarca. Este calamar fue cogido a unos 400 metros de profundidad y fue una captura accidental al caer éste en las redes de arrastre de un pesquero gallego.
El Museo de Luarca, afectado en 2014 por un fuerte temporal, perdió parte de su colección de calamares gigantes al ser arrastrados 6 de ellos por las olas que destrozaron sus instalaciones. Unos ejemplares importantes para el estudio de estos animales y que integraban una de las colecciones más completas y extensas del mundo.
¿Por qué se encuentran tantos kraken en el Cantábrico?
El investigador del Cepesma, Luis Laria, ha declarado que su abundante presencia en aguas cantábricas bien podría deberse a la gran profundidad de las fosas marinas astur-galaicas, con más de un kilómetro de fondo, y a haber en estas aguas gran cantidad de bancos de lirios. Éste es uno de los pescados de los que, según los resultados de las necropsias efectuadas a los calamares hallados, se alimentan estos calamares gigantes, además de pequeños crustáceos y cefalópodos. Al acudir a alimentarse a estos bancos de lirios es cuando suelen caer accidentalmente en las redes de los arrastreros.
Los estudios revelan que suelen habitar en profundidades de entre 400 y 2.200 metros, pueden tener entre 10 y 15 metros de longitud y se han llegado a registrar unas 20 especie distintas. Sea como fuere, estos animales continúan siendo un auténtico misterio, sin que aún se puede establecer a ciencia cierta las causas definitivas por las que se les encuentra más en algunas zonas del planeta que en otras.
Si quieres saber más sobre estos animales, te recomendamos leer el artículo sobre el extraño mundo de los calamares gigantes.