Recientemente en Supercurioso te contamos del potencial descubrimiento de un nuevo planeta en nuestro sistema solar, deducido por algunos astrónomos debido a ciertas perturbaciones observadas en las órbitas de los planetas enanos que se encuentran más allá de Neptuno y cuya más evidente explicación, según estos astrónomos, sería la presencia de un planeta de tamaño similar al del octavo gaseoso planeta.
Ahora, otros observadores proponen que este nuevo noveno planeta posiblemente no sea el último de su clase.
¿Podría haber más planetas sin descubrir en nuestro Sistema Solar?
Nuestro conocimiento de los objetos celestes presentes en el llamado espacio transneptuniano, y que se extiende hasta donde llegue la influencia gravitacional del Sol, sigue siendo bastante limitado. Para que tengas una idea: los astrónomos llaman Unidad Astronómica, UA, a la distancia que hay de la Tierra al Sol; nuestros ocho planetas conocidos se encuentran incluidos en las primeras 30 UA, el Cinturón de Kuiper –donde se mueven los planetas enanos como Plutón–, se encuentra a 50 UA y el área de influencia del Sol se extiende a unos 100 UA. Muchísima oscuridad por explorar.
Pero nuestra capacidad para observar está aumentando gracias a la incorporación de nuevos instrumentos como el ALMA (Atacama Large Milimeter/submilimeter Array), un radiotelescopio conformado por 66 antenas de alta precisión ubicado en el desierto de Atacama, Chile, a 5.000 metros sobre el nivel del mar, que ya ha servido para detectar dos anomalías en el espacio profundo del sistema solar, que bien podrían ser los planetas 10 y 11, aunque los científicos se han cuidado mucho de llamarlos de tal manera.
Un gran planeta situado en estas lejanas regiones del sistema solar reflejaría muy poca luz, pero en cambio podría ser detectado por sus emisiones de ondas milimétricas, que ALMA está capacitado para captar. Y de hecho, científicos de México y Suecia, utilizando ALMA, creen haber detectado dos objetos de grandes dimensiones en distintos puntos del espacio transneptuniano. Esta información se encuentra en dos publicaciones sometidas a la consideración de la revista científica Astronomy & Astrophysics, y un coautor de ambas, el astrónomo Wouter Vleming, señala que la intención al publicar este posible descubrimiento es llamar la atención de otros observadores que puedan ayudar a rastrear estos nuevos objetos.
ALMA y otros nuevos equipos de observación estelar prometen entregarnos en los próximos años nuevos y fascinantes descubrimientos de nuestro sistema solar y del universo que podemos observar.
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