Que los chicos buenos pierden a menudo frente a los malos, es una máxima ampliamente apoyada en el mundo de las citas. Concretamente la idea de que las mujeres heterosexuales tomarán al chico bueno como amigo, porque en realidad prefieren el desafío de salir con chicos malos. Ahora en cambio, y gracias a un estudio reciente, este tópico es científicamente verificable.
¿Nos gustan los chicos malos? La ciencia tiene respuestas
Una forma de investigar el tema fue presentar a las mujeres, hombres hipotéticos con diferentes tipos de personalidad y observar cuáles preferían. En uno de estos estudios, las participantes tuvieron que ayudar a un personaje de ficción llamado Susan a elegir una entre tres concursantes masculinos: Uno de ellos estaba en contacto con sus sentimientos, era atento y amable. Otro era el llamado «hombre de verdad», que se describía a sí mismo como insensible y poco amable. El tercer participante era neutro.
¿Y a quién eligieron? Contrariamente al estereotipo de que los individuos agradables se quedan en último lugar, la realidad fue que «el bueno» que fue elegido con más frecuencia tanto por Susan, como por las propias participantes.
Otros estudios han demostrado también que las mujeres prefieren a los hombres que son sensibles, seguros y fáciles de llevar, y que muy pocas (o ninguna) de las mujeres quieren salir con un hombre que es agresivo o exigente. La imagen que surge es clara: cuando las mujeres valoran a parejas hipotéticas, prefieren claramente los hombres «amables».
De hecho, el poder de la amabilidad no se debe subestimar. Algunos estudios han demostrado que tener una personalidad agradable puede incluso afectar a las impresiones de atractivo físico de una persona. Características tales como la calidez, amabilidad y el ser respetuoso son valoradas por las mujeres y los hombres. Tener estas cualidades no solo nos convierte en parejas más deseables, sino que también nos hace parecer más atractivos físicamente.
Por supuesto, a veces sí encontramos a los chicos «malos» atractivos. Los narcisistas, personas que muestran altos niveles de auto-importancia, superioridad, arrogancia y la voluntad de explotar a los demás, son a menudo percibidos como muy atractivos en los encuentros iniciales. Esto puede ser debido a que ponen mucho esfuerzo en su apariencia y la forma en que se presentan.
Pero al final, la idea de que las mujeres quieren salir con los chicos malos sólo refuerza la idea del misógino que engaña a las mujeres, mientras los hombres serios «agradables» se desconciertan por su falta de éxito. Por lo tanto, si queréis ligar, y estáis buscando respuestas en la ciencia, os damos un consejo simple: sed amables.
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