Hay personas que disfrutan disfrazándose y comportándose como perros. Parece que tienen una personalidad canina que se ha visto reprimida hasta el momento. Ahora, ya existe una comunidad en la que pueden ser como ellos quieran, con total libertad.

¿Te imaginas vivir y comportarte como un perro?

¡Estos humanos viven y se comportan como perros!

Todo empezó en Estados Unidos, un movimiento conocido como el de los «humanos-perros» que en los últimos años ha conseguido lograr difusión por otras partes del planeta. Gracias a las redes sociales, su práctica llegó a popularizarse y a ganar más adeptos. Más personas que necesitaban encontrar un lugar donde comportarse como perros.

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Un dueño, una relación más estable

La mayoría de las personas que se comportan como perros tienen un dueño, aunque no todas. Esto les hace sentirse seguros y protegidos bajo alguien con un rol dominante.

No obstante, también hay «encargados». Aquellas personas que se ocupan de aquellos humano-perros que no tienen dueño. Esto es importante en las reuniones que llevan a cabo.

Lugares privados

Estos humano-perros celebran encuentros en lugares privados. Un ejemplo sería la casa de un conocido o un lugar reservado para y por ellos.

En cada una de estas reuniones los perros humanos no hablan en ningún momento, como mucho ladran. Tan solo sus dueños pueden intercambiar palabras unos con otros.

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Los perros humanos reciben órdenes de sus dueños, ladran, juegan con otros humano-perros, se ponen boca arriba para que les rasquen la barriga…

Un práctica alejada de la zoofilia

Puede que estés pensando que esto tiene que ver con la zoofilia, pero no es así. De hecho, la forma de comportarse y de vivir como perros no suele guardar ninguna relación con la sexualidad, es decir, no tiene por qué existir un componente erótico.

Muchos humano-perros se reúnen para jugar, aunque si quieren llevar la experiencia al extremo pueden orinar como un perro y mantener relaciones de igual manera. Sin embargo, esto no es lo habitual.

De hecho, no es una práctica BDSM o de sumisión o sadomasoquista. Sencillamente, hay dos roles: amo y mascota. Una relación natural como podría haber entre una persona y un perro de verdad.

Pup Bain es un hombre que manifiesta lo siguiente: «Mi personalidad humana y mi personalidad canina se complementan y esto me permite encontrar el equilibrio. Mi personalidad humana es supremamente introvertida en contraste con mi personalidad canina. Con esta me transformo y adopto una actitud mucho más alegre y expresiva».

Aunque hay personas que podrían calificar esta práctica con un desorden mental, no se trata más que de una preferencia, un gusto y una forma de vivir diferentes. La Pup Social UK es una comunidad que se dedica a ofrecer eventos para ellos.

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