Estar en la cama, girar de un lado a otro, observar el techo de la alcoba, resignarte a no poder conciliar el sueño y tomar el teléfono móvil para soportar el desvelo… ¿te resulta familiar? El insomnio es un problema común que causa estragos tanto en la salud como en el desenvolvimiento diario por la falta de descanso.
Si no sabes qué hacer cuando no puedes dormir después de haber probado todo truco circulando por la red, a continuación te planteamos algunos consejos que quizá sirvan de ayuda.
¿No sabes qué hacer cuando NO puedes dormir? 6 consejos para… Zzzz…
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Evita desesperarte
Entendemos de esa frustración que nos asedia cuando resulta difícil conciliar el sueño. Aún más teniendo presente que al día siguiente debemos levantarnos con la salida del sol para cumplir con nuestras responsabilidades. Pero esta exaltación solo conduce a emociones negativas que retardarán el proceso de descanso.
“¿Entonces qué hacer cuando no puedes dormir?” Te preguntarás. Los especialistas del sueño recomiendan no guardar relojes cerca de la cama y salir de ella si no puedes dormir. Estos dos consejos básicos son aplicados en terapias de control de estímulo, con los que se pretende programar el cerebro que asocie la cama como un lugar de descanso, en vez de convertirlo en un espacio para sobrepensar.
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Mantén la calma, practica la relajación
La ansiedad que provoca el insomnio produce hormonas del estrés que nos impiden viajar plácidamente a tierras de Morfeo. La relajación puede ayudar para solventar este problema.
Prueba a acostarte de espaldas, relajando los músculos, al mismo tiempo que respiras profunda y lentamente. Aprieta los dedos de los pies fuertemente y luego libéralos. Puedes hacer lo mismo con los dedos de las manos y soltar. De igual manera, ejerce presión en los muslos para después relajarlos como en los ejercicios anteriores. Verás que después de realizarlos estarás más preparado para el descanso.
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Un truco sencillo para dormir: gira los ojos
Sí, es muy fácil. Solo debes cerrar los ojos, girar los globos oculares y repetir los giros al menos unas tres veces para conciliar el suelo.
¿Te parece extraño? Pues, en realidad, cuando dormimos lo hacemos de forma natural, por lo que, emulando estos movimientos, estimulamos la liberación de la hormona del sueño, la melatonina.
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Despierta tu imaginación
La práctica de despertar la imaginación es tan simple como todos los consejos que aquí exponemos sobre qué hacer cuando no puedes dormir. Consiste en recrear mentalmente paisajes o lugares que inspiren paz y armonía.
Ya sea con los bosques, playas, montañas o un recuerdo de la infancia, si viajas con la mente a tu “lugar feliz”, este estímulo sin duda te conducirá a un estado de relajación que favorecerá el descanso. Quizá si lo haces con mucha concentración, podrás percibir aromas, sensaciones y texturas ¡inténtalo!.
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Apaga la televisión y dispositivos móviles
Mientras más distraídos nos encontremos, más lejana será la hora del sueño. Así que estarás de acuerdo con que la televisión y los teléfonos móviles son dos elementos sumamente eficaces a la hora de distraernos, que nos abstraen de dormir a tiempo suficiente para alcanzar al menos unas 8 horas de descanso diario.
¿Qué proponemos? De acuerdo a Sammy Margo, autora de La guía del buen sueño, “recordar conversaciones, vistas y sonidos, te ayuda a alcanzar un estado mental que te prepara dormir”. Recomienda hacerlo en orden inverso, con hechos mundanos, para ayudar a despejar la mente de preocupaciones.
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Y, ¿por qué no un poco de té?
Existen varias hierbas con propiedades que favorecen el sueño, como la valeriana, el té de menta, la melisa o toronjil. Son beneficiosas, efectivas y representan una alternativa natural para atacar este problema.
Recomendamos consumir el té -cual sea de tu elección- al menos una hora antes del momento en que planeas irte a la cama. Te servirá para a atacar estados de ansiedad, nerviosismo, y por supuesto, a combatir el insomnio.
¿Qué te han parecido estos consejos? ¿Probarías alguno de ellos? Además de estos tips efectivos para recargar de energía al cerebro, es aconsejable detectar si el problema es crónico, ya que el insomnio puede ser síntoma de enfermedades serias, de un efecto secundario a medicamentos prescritos o parte de un trastorno del sueño como la apnea, problemas con el ritmo cardíaco o síndrome de piernas inquietas. En estos casos es necesario asistir al médico para dar con la mejor solución.
Para más información, te invitamos a leer: 5 cosas que te llevan directamente al insomnio.
Imagen: mitarart / 123RF Foto de archivo