Desde el neolítico, los seres humanos han buscado la manera de incidir sobre la realidad mediante actos considerados mágicos. Los hechizos, y en particular los conjuros, intentan producir ese efecto. Estos actos tienen siempre un ritual o una liturgia y tienen diferentes denominaciones según lo que pretendan. Así, se denominan sortilegios si pretenden adivinar el porvenir y encantamiento, maldición o bendición si quieren influir en una persona o en un objeto o incluso someterlos. Como tradición, que forma parte de muchas religiones paganas, nos ha parecido interesante y curioso conocer estos 6 elementos necesarios para realizar un hechizo que se repiten a lo largo de la historia de la humanidad.
6 Elementos para un Hechizo
A pesar de que el hechizo tiene diferentes maneras de realizarse e incluso en ocasiones se considera que puedeproducirse de manera involuntaria (algunos casos de mal de ojo), los 6 elementos siguientes se encuentran presentes en la mayoría de tradiciones históricas.
1. Preliminares
En este primer momento, las personas que van a tomar parte en el hechizo preparan tanto los materiales para realizarlo como su propia mente o cuerpo. Son comunes en este primer estadio los ayunos, las oraciones, etc. con el fin de conseguir un estado considerado espiritualmente óptimo en los participantes.
2. Apertura o inicio
Al empezar el ritual se busca conseguir una comunión entre todos los que van a participar creando un entorno que sea propicio a la magia que se está buscando. El inicio o apertura suele ser solemne.
3. Invocación
Para que las fuerzas sobrenaturales participen en el hechizo, se las invoca exigiendo o suplicando que colaboren.
4. Ejecución
Es el punto central del hechizo, en la ejecución se realizan los actos mágicos que han de conseguir aquello que se busca: la alteración del curso de la realidad. Las entidades invocadas deben conseguirlo.
5. Ofrenda o Sacrificio
Las fuerzas sobrenaturales bajo cuya advocación se encuentran los practicantes del hechizo, parecen necesitar un sacrificio. Éste puede ser real o simplemente simbólico, pero a través de esa ofrenda lo que se pretende es ganarse el favor de esas fuerzas.
6. Final o cierre
Para finalizar el hechizo se requiere de nuevo un acto solemne en el cual se da por acabado el proceso. En ese momento se diluye el entorno mágico que se ha creado durante la apertura o inicio.
Los hechizos se remontan al neolítico y parecen tener su raíz en la relación aparentemente mágica que surgía de actos considerados menores y cuya consecuencia era inmensa. Así, los antiguos, que carecían de método científico, veían que arrojando semillas al cabo de un tiempo crecían plantas y que de una simple relación sexual podía nacer un bebé. Estos actos aparentemente mágicos, según los historiadores, pudieron crear en la mente humana a través de los siglos, la conciencia de que a partir de determinados rituales se podía modificar la realidad.
Si se observa con atención estas diferentes partes se verá un extraordinario paralelismo con algunos rituales de las religiones modernas. ¿Qué opinas?
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