El Antiguo Egipto ejerce una gran fascinación sobre todos aquellos que amamos la historia y si además le añadimos algo de literatura y un misterio, quizá seamos capaces de trasladarnos hasta hace más de 3.500 años e intentar resolverlo. En Supercurioso os hemos hablado ya de una historia egipcia que pudo estar en la base de un cuento europeo: La historia de la esclava Ródope, el origen egipcio de la Cenicienta. En esta ocasión queremos proponeros un juego, ¿puedes acabar el cuento del Antiguo Egipto del Príncipe Predestinado?
El cuento del Antiguo Egipto del Príncipe Predestinado
Si os proponemos este juego es debido a que el cuento del Príncipe Predestinado está incompleto. Fue encontrado en el reverso del Papiro Harris 500 perteneciente al Imperio Nuevo que se desarrolló entre los años 1550 a.C. y 1070 a.C. El cuento está escrito en escritura hierática y se cree que fue escrito durante el reinado de de Seti I o en el de Ramsés II.
El cuento del Antiguo Egipto empieza con un rey que desea fervientemente tener un hijo y no lo consigue, de manera que reza a los dioses y su esposa esa noche concibe el hijo deseado. Al nacer, la diosa Hathor que marca el destino de los recién nacidos, predice que morirá por un perro, una serpiente o un cocodrilo. Su padre, para protegerlo, construye un palacio aislado en una montaña y lo encierra en él. El príncipe, asomado a la ventana, ve a un hombre con un perro y le pide a su padre que le regale uno. El padre, no queriendo que su hijo se sienta desgraciado, le entrega un pequeño cachorro creyendo que no hay peligro en ese animal. Cuando el niño se hace adulto abandona la protección del palacio con el convencimiento de que, si su destino estaba marcado, no conseguirá huir de él aislándose y que es mejor enfrentarlo. Viaja al reino de Nahrin, cerca del Éufrates, y allí se une a un grupo de príncipes de diversos países que intentan conseguir la mano de una princesa real. El rey había prometido su mano a quien consiguiera escalar la torre en la que estaba encerrada. Pasados unos meses sin que nadie lo consiguiera el príncipe egipcio, que había mantenido oculta su identidad, consigue llegar a la ventana de la princesa y a pesar del recelo inicial del rey, se casa con la joven.
La segunda parte de este cuento del Antiguo Egipto empieza cuando el príncipe confiesa a su esposa su verdadera identidad y le explica su destino. La princesa lo salva de una serpiente que está a punto de atacarlo mientras duerme, venciendo así al primero de sus posibles destinos. El príncipe sale a pasear acompañado de su perro y éste le habla para decirle que él es su destino. El joven se asusta a pesar de que durante años nada malo ha recibido de su amigo y huye hasta un lago en el que encuentra un cocodrilo. Éste le dice que no lo matará si combate por él contra un demonio gigante acuático que lo ataca todos los días, la próxima vez que aparezca. Aquí queda cortado el relato.
¿Qué crees que puede ocurrir en este cuento del Antiguo Egipto? ¿Vuelve el perro y lo salva de un cocodrilo traidor? ¿Hay un giro inesperado en la historia? ¿Puedes acabar el cuento del Príncipe Predestinado? ¡Esperamos tu final! Si te gustan los cuentos, te invitamos a leer el post: Cuentos de Hans Christian Andersen que te aterrorizarán.