Durante casi 2.000 años los llamados Manuscritos del Mar Muerto o Rollos de Qumrán permanecieron ocultos en la profundidad de una serie de cuevas. ¿Quién los escondió? ¿Cómo los encontraron? ¿Qué importancia tienen? Conozcamos la historia del descubrimiento de los Manuscritos del Mar Muerto.
El descubrimiento de los Manuscritos del Mar Muerto
Este fantástico descubrimiento fue fruto de la más absoluta casualidad. Todo empezó con una cabra perdida que llevó a sus dueños a uno de los mayores hallazgos de la historia de la literatura.
Cerca del Mar Muerto existen unas colinas llamadas de Qumrán. Es una zona prácticamente desértica cuya única utilidad era servir de pastoreo a ovejas y cabras. Entre finales de 1946 y principios de 1947, dos primos llamados Jum’a y Mohammed ed-Dhib, beduinos pertenecientes a la tribu Ta’amireh, pastoreaban sus rebaños por la zona de Qumrán cuando una de sus cabras desapareció dentro de una cueva. Los primos se acercaron a la entrada, pero debido a la oscuridad no pudieron avanzar. Lanzaron al fondo de la cueva unas piedras y oyeron como se rompía un recipiente de barro. Ayudado por su primo, uno de ellos bajó a la cueva y recogió 7 pergaminos. La familia los tuvo en su campamento durante un tiempo y los mostraba a la gente para conocer su valor. Intentaron venderlos en una ciudad cercana, pero un comerciante de Belén les dijo que no valían nada y que posiblemente fueran robados de una sinagoga. Finalmente fueron vendidos y 4 de ellos los compró el archimandrita del monasterio sirio-ortodoxo de San Marcos en Jerusalén, conocido como Mar Samuel. Los otros 3 llegaron a manos del profesor judío Eleazar Sukenik, arqueólogo de la Universidad Hebrea de Jerusalén. El Dr. John C. Trever , de la Escuela Americana de Investigación Oriental tuvo acceso a los 7 manuscritos y dio a conocer el verdadero valor y antigüedad de los mismos.
El problema fue que en 1948, antes de que pudiera organizarse una expedición arqueológica para buscar la cueva y averiguar si habían más escritos, estalló la guerra árabe-israelí. Finalmente en 1949 se localizó la cueva original y tras ella, hasta 1956, se encontraron varias más que escondían en ollas de barro preciosos manuscritos además de otros objetos y un rollo de cobre. En total 11 cuevas y unos 600 documentos y cientos de fragmentos de un valor incalculable.
Datados entre el 250 a. C. y 66 d. C, se cree que fueron escondidos por los esenios, una secta religiosa de la época, por temor a las represalias de los romanos que concluyeron con la segunda destrucción del Templo de Jerusalén en el año 70 d.C. Son básicamente escritos bíblicos con una antigüedad más de 1.000 años superior a otras copias conocidas y libros y manuscritos de temas religiosos. Las lenguas de los escritos son el hebreo, el griego y el arameo.
El descubrimiento de los Manuscritos del Mar Muerto se considera uno de los mayores descubrimientos de la historia de la literatura. Si te ha interesado este artículo, quizá quieras conocer otros manuscritos insignes como El libro más enigmático de la historia: el manuscrito Voynich.
Imagen: MotherForker