Los tiempos cambian, y creemos pensar que para bien. En la actualidad a muchos nos puede seguir llamando la atención ciertas costumbres que por ejemplo, nos cuentan nuestros padres y madres sobre sus años de juventud, normas de «cortesía» o de «educación» que solían diferenciar mucho lo que se esperaba de un hombre a lo que se intentaba inculcar en una mujer.
Si bien es cierto que hoy en día seguimos viendo alguna que otra actitud sexista, no es nada comparado a lo que sucedía en los años 40, por ejemplo. Podemos hablar de glamour, de romanticismo, pero guías sobre la educación femenina de la época nos siguen sorprendiendo. Hoy en Supercurioso queremos traerte una en concreto que circuló en diversos periódicos con fecha de 1938, y que a día de hoy se sigue publicando a modo de curiosidad para arrancar «una sonrisa piadosa» de los lectores o internautas.
Te invitamos a descubrirlas con nosotros.
Guía para mujeres solteras de 1938: ¡No podrás creerlo!
1. Prohibido hacer esperar a tu cita
¡Ni se te ocurra! Es más, tenemos claro que a día de hoy a ninguno de nosotros nos gusta retrasarnos y aún menos que lo haga nuestra pareja.
Ahora bien, en el año 1938 se recomendaba a la mujer que se vistiera con tiempo de antelación con tal de estar impecable cuando el caballero en cuestión llamara a a la puerta. E importante recibirlo con una gran sonrisa.
2. No pidas prestado el pañuelo
Está claro que en esa época no parecían usar aún pañuelos de papel, y por lo visto, parecía ser también una costumbre el que la mujer pidiera esta prenda a su pareja muy a mendudo.
La guía de la mujer soltera advertía de que nunca debía hacerse: jamás pidas el pañuelo a tu acompañante para arreglarte el maquillaje. Hazlo en privado.
3. ¡Esas posturas!
La mujer debe ser delicada, elegante y guardar la compostura en todo momento. Queda prohibido sentarse de modo desgarbado, con las piernas muy separadas o con la espalda inclinada. ¡Ofrece muy mala imagen!
Si la joven se aburre, debe evitar ante todo bostezar e, importante, mascar chicle con la boca abierta.
4. A la hora de bailar…
A la hora de bailar hazlo exclusivamente con tu pareja, no lo hagas con nadie más. Y recuerda además algo importante «cuando bailes no hables». Cuando un hombre baila es que no desea otra cosa, no lo molestes con otros temas…
5. Prohibido usar el espejo retrovisor para arreglarte el maquillaje
Ni se te ocurra. Jamás lo hagas. Si necesitas retocar tu pintalabios o el colorete hazlo con tu propio espejo y no con el espejo retrovisor del automóvil.
¡Los hombres lo necesitan para conducir!
6. Nada de ponerse cariñosa en público
Es de mala educación y no debe hacerse. Jamás acaricies a tu pareja en público ni le toques el cabello, se considera de mal gusto y humillante para él.
7. No bebas durante la cita
Si bebes durante la cita darás una imagen descuidada y cometerás imprudencias, como hablar con otros hombres o dar a entender que has perdido tu dignidad. De hacerlo, lo más probable es que tu pareja no te vuelva a llamar nunca más.
8. Halaga a tu pareja
Nada de hablarle de ropa o de cosas sin sentido. Lo ideal es que te centres en tu acompañante y que te preocupes por halagarlo, por sacar temas de conversación que le gusten a él. De ese modo tendrás mucho éxito en tu cita.
Como puedes ver esta serie de consejos nos dejan con la boca abierta, es posible que nos arranquen más de una sonrisa y que a alguien, le hayan molestado. No obstante, esta guía publicada en los periódicos de Estados Unidos en 1938, han quedado afortunadamente obsoletos para servir únicamente, como datos curiosos curiosos con los cuales sonreírnos.
Si te ha gustado este artículo, quizá tengas curiosidad por saber cómo ligaban en la época victoriana.