Plátano, cambur (en Venezuela), banana, esta maravillosa fruta, tan bien nombrada científicamente (Musa paradisiaca), amada y consumida en casi todo el mundo, podría encontrarse en peligro de extinción, al menos como producto mundial de exportación. No es la primera vez que se plantea la desaparición de los plátanos del comercio internacional, pero no por eso deja de ser tremendamente inquietante.
En 5-10 años un hongo podría causar la desaparición de los plátanos, ¿hay solución?
En la década de los 60, la principal especie de banano comercial consumida en el mundo era la Gros Michel, una variedad que se vio barrida por un hongo conocido como mal o enfermedad de Panamá, que obligó a buscar otra clase de plátano resistente a este hongo, y que resultó ser el Cavendish, actualmente el más consumido en el planeta. Sin embargo, ya en los años 70, en el sudeste asiático surgió otra cepa de este hongo (Fusarium oxysporum), que ataca las raíces y contra la que se viene luchando en Asia, Oceanía y África desde entonces, aunque también ya está presente en América Latina, donde se encuentra la mayor producción de plátanos del mundo. Mientras se buscaba desarrollar un tipo de plátano Cavendish capaz de resistir esta plaga, ha surgido una nueva amenaza, otro hongo conocido como la sigatoka (Mycosphaerella fijiensis), que ataca las hojas y acaba rápidamente con plantaciones enteras en tan poco tiempo, que se calcula podría terminar con la versión comercial de plátano en un lapso comprendido entre 5 y 10 años. ¿Por qué son tan virulentas y globales las plagas del plátano? Tal vez no sepas que el banano no se reproduce por semillas sino por “hijos”, o clones, y es como si todas las grandes plantaciones del mundo, donde se usa la variedad Cavendish, fueran un solo individuo. Esta uniformidad favorece la rápida y fácil diseminación de plagas. Esta nueva amenaza tiene a científicos y agrónomos de todo el mundo buscando una solución que sea también rápida y eficiente. Una sería desarrollar o encontrar una nueva variedad resistente a estos hongos; otra apuntaría a conocer mejor al enemigo, que ha sido la estrategia adoptada por investigadores de la Universidad de California en Davis. Ioannis Srtegiopoulos, patólogo de plantas de la UC Davis y coordinador de esta investigación, estudió el modo en que las distintas cepas de sigatoka atacan los plátanos, manipulando el metabolismo de estas plantas para alimentarse de sus nutrientes.
«Este cambio paralelo en el metabolismo del patógeno y la planta huésped ha sido pasado por alto hasta ahora y puede representar una huella digital molecular del proceso de adaptación. Es realmente una llamada de atención a la comunidad de investigación».
En el estudio realizado en la UC Davis, y publicado en la revista digital PloS Genetics, lograron secuenciar el genoma de las tres cepas de sigatoka, un paso esencial en la elaboración de alguna clase de control biológico o químico. Quizás no veas la total desaparición de los plátanos, pero sí cómo se vuelve más caro y es probable que comiences a ver variedades exóticas, distintas al Cavendish, de este fruto tan querido por niños y adultos de todo el mundo. Si quieres saber más de esta extraordinaria fruta, lee por qué sus frutos crecen hacia arriba, y los beneficios de comer plátanos con manchas oscuras.