No debería sorprendernos que a los niños pequeños les dé miedo dormir solos y prefieran pasar la noche con sus padres. Muchos pequeños pueden ver la sombra de alguien al acecho, o temer la presencia de un monstruo o un desconocido en su habitación. Eso pensaba la madre de una niña inglesa de cuatro años, que todo era mentira o una pesadilla de su hija. Según la niña, un hombre la acechaba desde su ventana todas las noches. La madre pensaba que era una pesadilla de su hija… hasta que descubrió que era verdad: un hombre pasaba la noche junto a la ventana de la pequeña.
Según la niña, todas las noches un hombre se acercaba a su ventana y le decía si quería irse con él. Por suerte nunca aceptó y, aunque se lo dijo en varias ocasiones a su madre, ésta pensó que era una pesadilla de su hija, hasta que un día decidió pasar la noche en la habitación de su pequeña. Pasando la noche con ella se aseguraría de que no pasaba nada raro en la ventana y la niña podría dormir tranquila toda la noche. Pero la sorpresa de la madre fue enorme cuando descubrió que el hombre en la ventana del que hablaba su hija existía.
Se busca al desconocido de la ventana
La madre vio a un hombre apoyado en un poste de luz frente a su casa, mirando hacia la ventana de la niña. Pero el misterioso desconocido se fue cuando descubrió la presencia de la madre en la habitación de la niña. Inmediatamente, la mujer llamó a la policía para denunciar la presencia del desconocido en la ventana. La policía de Somerset ha puesto en marcha una investigación para tratar de identificarlo, ya que sospechan que el mismo hombre podría haber acechado e intentado secuestrar a más niños del suroeste de Inglaterra, donde vive la niña.
Por ahora, la única pista es la descripción de la niña y la madre. Según la pequeña, el misterioso hombre vestía ropa oscura, era un hombre fornido de raza blanca y es más mayor que su padre, que tiene 36 años. Pese a las sospechas de que haya acosado a más niños, la policía señala que todavía no le ha hecho daño a ninguno, aunque destacan que tiene un problema importante.
Hacerle caso a los niños
Esta historia tenía todos los ingredientes para haber acabado en tragedia, pero por suerte ha tenido un final feliz para esta familia. La pequeña ya puede dormir tranquilamente en su cama, sin nadie que la aceche en la ventana. Tras esta experiencia, la madre ha recomendado a todos los padres que se crean todo lo que les digan sus hijos, porque como dice el dicho: los niños y los borrachos siempre dicen la verdad.