Los científicos italianos Minetti, Ivanenko, Cappellini, Dominici y Lacquaniti se merecen un premio por un experimento digno de superhéroes: por primera vez usaron un modelo matemático para predecir que los seres humanos serían capaces de caminar sobre el agua en gravedad reducida, ¡y luego lo probaron mediante zapatos especiales y una piscina para niños!
Hay un lugar donde podrías caminar sobre el agua
Jesús caminando sobre el agua es uno de los milagros más conocidos del Nuevo Testamento. Esta historia cuenta cómo los discípulos vieron a Jesús caminando sobre el Mar de Galilea. Algo que muchas personas han intentado imitar, fracasando. A pesar de los numerosos «fakes» que podemos encontrar en Internet, los seres humanos son aparentemente incapaces de caminar o correr sobre el agua, PERO (¡sí, por una vez un «pero» es bienvenido!) si este acto se ejecuta en un lugar con agua en gravedad reducida sí.
En 2012, los científicos realizaron un estudio para predecir los niveles de gravedad en el que los seres humanos podrían caminar sobre el agua. Usaron arneses especiales para simular la gravedad reducida, y también se equiparon con aletas para sus pies, logrando caminar sobre el agua con éxito.
En la Tierra sólo unas pocas especies como los insectos zancudos de agua, algunas aves acuáticas y lagartos, puede correr sobre el agua. Para la mayoría de las otras especies, incluyendo a los seres humanos, esto es imposible debido al tamaño y las proporciones del cuerpo, la falta de apéndices adecuados, y la potencia muscular limitada. Sin embargo, si la gravedad se reduce a menos de la de la Tierra, moverse sobre el agua debería requerir menos energía muscular. Aquí se utiliza un modelo hidrodinámico para predecir los niveles de gravedad en el que los seres humanos deberían de ser capaces de correr sobre el agua.
Los científicos probaron estas predicciones en el laboratorio utilizando un simulador de gravedad reducida, que se adaptó a una ecuación modelo, utilizada anteriormente por Glasheen y McMahon para explicar la dinámica de lagarto basilisco, que predecía la masa corporal, la frecuencia de zancada y la gravedad necesaria para que una persona a corriese sobre el agua.
Así, las predicciones teóricas sobre si una persona podría correr sobre el agua en la Luna, mostraron que los seres humanos, al igual que el lagarto basilisco, y a pesar de la alta frecuencia de zancada y el esfuerzo intensivo del aparato locomotor, se establecían a una altura casi constante que los mantenía sobre el agua.
Entonces, podríamos decir que por el momento el único lugar en que el ser humano sería capaz de caminar sobre el agua sería la Luna.
Algo a tener en cuenta en los futuros parques de agua en nuestro querido satélite. Suponemos que unas vacaciones temporales para realizar este tipo de incursiones científicas no deben ser tan malas como algunas de las estancias más largas en la Estación Espacial Internacional. ¿Algún voluntario?
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Imagen: Christian Wallpaper