Son muchas las pinturas con mensajes ocultos que han protagonizado las intrigas e investigaciones de curiosos y académicos durante siglos. Desde los misterios de la Monalisa y hasta los enigmáticos retratos de Mozart joven, el arte resguarda un universo de cosas no dichas, que es tan o más fascinante que las propias obras. Hoy en Supercurioso queremos hablarte acerca de los detalles ocultos en El jardín de las delicias. Esta épica pintura no es solo una de las más famosas en la historia del arte, obsesionando a fanáticos a través del tiempo. Es también un cuadro cargado de simbolismos, que desnuda una peculiar visión del mundo, del pecado y de la moral. Acompáñanos a profundizar en el significado de El jardín de las delicias.
El significado de El jardín de las delicias
El pintor holandés Jheronimus Bosch, más ampliamente conocido como el Bosco, es dueño de uno de los más brillantes pinceles en la historia del arte. Su obra está marcada por el misterio y la simbología. Potente y comunicativo, es uno de los más notables exponentes de la pintura en los siglos XV y XVI. Hombres con cuerpos de animales, con torsos mitad humanos y mitad pez, túneles misteriosos que conducen a los desconocidos caminos de la muerte, e imágenes que desafían la comprensión y la razón, son algunos de los elementos que definen su obra.
Pero en el significado de El jardín de las delicias nos encontramos con un auténtico reto. Se trata de una de las obras más populares y emblemáticas del autor, y en sus confusas y anárquicas imágenes nos plasma una potente visión del mundo. Un mundo dominado por el pecado y una moral cada día más débil. Esta impresionante pintura al óleo forma parte del Patrimonio Nacional de España y se encuentra en el Museo del Prado, como parte de la exposición permanente de esta importante institución. Ahora, un poco más de medio milenio después del nacimiento del Bosco, su obra más trascendental es puesta bajo la lupa nuevamente para analizar los casi infinitos detalles dejados allí por el célebre pintor holandés. Descubre los detalles ocultos en El jardín de las delicias.
Los detalles ocultos en El Jardín de las delicias del Bosco
Las apuestas monstruosas
Otro de los elementos interesantes a profundizar en el significado de El jardín de las delicias, es la sagaz manera en la que el pintor plantea un nexo entre el infierno y los juegos de azar. Entre los demonios que retrató el Bosco en el panel dedicado a los sufrimientos del infierno se observa una grotesca escena de tortura, mutilación y, desconcertantemente, juegos de azar. Esto es porque, además de torturarlos físicamente, los monstruos del infierno también infligen daño psicológico a sus víctimas, jugando con ellas. Bosch retrató cómo las almas en pena eran llevadas a la locura por la ansiedad, el miedo y la desesperación, con imágenes que, una vez detalladas, no salen del recuerdo del espectador.
La seducción como eje central
Iniciamos este recorrido por los detalles ocultos en El jardín de las delicias, considerando el tema de la seducción, como el eje central de toda la obra. El Bosco plantea en esta pintura una composición que se divide en tres planos: uno central y de mayor tamaño, y dos laterales. Cada plano del cuadro tiene un elemento de agua, alrededor del cual se elevan las más variadas figuras: osos, toros, panteras, unicornios o jinetes que cabalgan sobre el lomo de jabalíes. Las imágenes representan los pecados capitales por los que se ve atravesado el corazón del hombre. Pero entre la avaricia, la soberbia o la ira, destaca la seducción. Ésta se representa en las figuras de montones de mujeres desnudas, que incitan al vicio y la lujuria, mientras se bañan desnudas en los estanques.
Los Pájaros con doble sentido
Los pájaros con un doble sentido peculiar son otro de los detalles ocultos en El jardín de las delicias. Con estas figuras El Bosco muestra un poco de su oscuro sentido del humor. No solo llena el cuadro de escenas grotescas, sino también del todo inverosímiles. En el cuerpo central del tríptico hallamos a un grupo de personas desnudas montando pájaros gigantescos, entre ellos un petirrojo, un pato y un pájaro carpintero. Con esto, Bosch podría haber estado haciendo una broma visual: los pájaros podrían ser tomados como un doble sentido. Además de ser una forma plural obsoleta, la palabra holandesa «vogelen» (vogel que significa pájaro) podría referirse a tener relaciones sexuales.
Un edén de la lujuria
Seguimos este recorrido por los detalles ocultos en El jardín de las delicias, reviviendo un simbolismo en el que han coincidido muchos de sus críticos. La pintura nos muestra la escena en la que Dios presenta a Adán y a Eva. Mientras ella permanece de rodillas, el disfruta embelesado de su belleza. Pero lo que muestran las imágenes va mucho más allá de esta idea de la creación original, la desvirtúa y la complejiza. A lo largo del tríptico nos encontramos con personas negras y blancas, muchas de ellas desnudas, y otras con mitades animales de cuerpos. No se distinguen edades e incluso pueden llegar a confundirse los sexos. Lo que si permanece como constante son las relaciones tanto heterosexuales como homosexuales. E incluso nos topamos con imágenes bizarras, como la de un personaje a la izquierda de la pintura, que tiene flores en su trasero y en su mano. Una obra que habla sobre el mundo dominado por la lujuria.
Las frutas del amor
Una fruta que aparece repetitivamente en el panel central del Jardín de las Delicias son las fresas. En una sección, se ven personas tomando manzanas de los árboles, mientras que un hombre ofrece una fresa a una mujer con una expresión descarada, lo que puede ser interpretado como un giro en las representaciones bíblicas del Edén. En otro, las parejas se alimentan con bayas, una escena tradicionalmente asociada con el romance cortés. Sin embargo, en el cuadro del Bosco, estas personas hacen más que coquetear. Muchos críticos que han profundizado en los detalles ocultos en El jardín de las delicias, exponen que se usa a la fresa como un símbolo del fruto del amor, pero más que religioso, mundano, apasionado y lujurioso.
Y tu, ¿Conocías estos oscuros simbolismos y detalles ocultos en El jardín de las delicias? ¿Te habías puesto a detallar la inmensidad de mensajes que permanecen en las imágenes de este cuadro fenomenal? Bien decía el escultor británico Henry Moore en una de las más conocidas frases sobre la lujuria, que «La envidia, el odio, la lujuria y todas esas pasiones, han sido arrojadas al alma para que ésta no sea sino una pieza de hielo». Y en el significado de El jardín de las delicias, bien lo podemos visualizar. Si te ha gustado esta impresionante obra, seguro te interesará conocer todo sobre La extracción de la piedra de la locura, otra de las afamadas obras de este polémico pintor.