Hoy en día existen numerosas organizaciones que conciertan a través de Internet encuentros internacionales entre personas que desean contraer matrimonio. Esta manera de encontrar pareja, por un medio que ponía en contacto a los interesados sin un conocimiento previo, se estableció hace siglos. Cómo no existía Internet se utilizaba el correo y los anuncios por palabras de las más variadas publicaciones. Uno de los lugares en que más fructificó el sistema de NOVIAS POR CORREO fue en el Salvaje Oeste.
NOVIAS POR CORREO para el Salvaje Oeste
Las primeras esposas por encargo llegaron a las Colonias Americanas a principios del siglo XVII. La escasez de mujeres en el Nuevo Mundo y el fracaso de las uniones con las nativas, debido especialmente al contagio de enfermedades para las que no tenían defensas, propició este tipo de matrimonios. Pasaron los años y el problema de la carencia de féminas se trasladó a la zona oeste de EE.UU. Los nuevos colonos solicitaban el envío de esposas tanto a las ciudades del Este como a sus países de origen.
Las nuevas tecnologías que iban apareciendo cambiaron mucho la situación. La llegada del ferrocarril, los barcos de vapor, el telégrafo y especialmente de la fotografía facilitaron enormemente la elección de la persona con la que contraer matrimonio. Sobre 1850 floreció lo que podría denominarse la «industria de la novia por correo». Muchos futuros maridos insertaban anuncios personales en diarios o revistas para tratar de encontrar una esposa. A partir de 1870 se hicieron publicaciones en forma de libro con fotos de las posibles novias, como si se tratase de un catálogo. Al retrato añadían un perfil de la postulante.
Durante muchos años eran muy pocas las mujeres que se aventuraban a viajar a la frontera. Unas pocas, acompañadas de sus hijos, viajaban en carromatos con sus maridos, pero la mayoría de hombres se establecían solos. En los pueblos que se iban fundando solían haber prostitutas, pero no era lo que buscaban la mayoría de pioneros o los mineros en California. Estaban deseosos de formar una familia y encontrar a alguien con quien compartir penas y alegrías.
Al finalizar la Guerra de Secesión fueron muchas las mujeres que se trasladaron al Oeste. Debido a la guerra, en el Este habían muerto muchos varones y sobraban féminas que, en aquella época, si se quedaban solteras o viudas tenían muy pocos medios para subsistir. Una boda era la mejor solución. En el Oeste en cambio sobraban los hombres. El periódico de más éxito para la búsqueda de pareja fue el «The Matrimonial News» que cobraba una cifra muy alta por cada anuncio. Se cree que a través de esta publicación se llegaron a concertar unos 3.000 matrimonios. Eso sí, había que ir con cuidado, pues como en todos estos asuntos había estafadores que se aprovechaban de los corazones incautos.
El sistema de «novias por correo» tuvo detractores que consideraron que era poco menos que comercio de personas y que las mujeres sin medios se vendían al mejor postor. Sin embargo, sus defensores indicaban que de no ser por este método jamás se hubieran conocido estas personas y el Oeste no se hubiera pacificado y poblado.
¿Qué opinas del sistema de «novias por correo»? ¿Crees que lo que ahora ocurre en Internet se asemeja? Si te ha interesado este post, quizá quieras leer: La pesadilla de las mujeres sobrantes chinas