¿Te has preguntado alguna vez para qué sirven las anillas de las latas de refresco y de cervezas que bebemos usualmente? Seguramente habrás jugado el típico juego de las letras para ver en cuál de ellas se separa la anilla de la lata, pero no, las anillas no solamente sirven para eso. ¿Quieres descubrirlo?
Las diferentes utilidades de las anillas de latas
¿En cuántas ocasiones has pensado que la pajita no tiene mucho que ver con la lata porque esta no se ha estado quieta cada vez que queríamos beber? Lo que no sabías es que la triquiñuela estaba en girar la anilla en dirección al agujero de la lata, así teníamos el espacio perfecto para meter la cañita y beber gustosamente el refresco o la cerveza de la lata.
El prototipo de anilla que conocemos ahora apareció en el año 1980, llamándose “stay-tab”, pues la anilla, al abrirse la lata, no se separaba del envase y de este modo se colaboraba con el sistema de reciclado y con el medioambiente.
Si te fijas en la forma de ocho que tiene el sistema, puedes darte cuenta de que un extremo de la anilla queda fijado a la lata, pero el otro se queda libre con un hueco en el centro, aparte de la función que hemos mencionado anteriormente de fijar la pajita, este espacio central también sirve para tirar de la anilla y abrir la lata.
Cuando introduces la pajita dentro de la lata, sin utilizar la anilla, el gas hace que la pajita se eleve evitando que se quede inmóvil, el diseño stay-tab impide que la pajita se mueva y puedas beber cómodamente.
En realidad, este es el modo más higiénico de beber de una lata, teniendo en cuenta que las latas y demás envases siempre están de un lado para otro en su transporte a centros comerciales e hipermercados.
Tampoco olvides que las formas de reciclar este tipo de envase, pueden ser muy variadas, desde artículos reciclados para decorar tu hogar hasta complementos, como las pulseras.
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