Lo que ocurre después de que morimos es un misterio atemporal, que nos ha preocupado  desde que fuimos conscientes de la finitud de la vida humana. Sin embargo, científicos han descubierto lo que le sucede a nuestros cerebros después de perder la vida.

Incluso después de perder la vida, el cerebro humano reconoce esta condición

Hasta ahora no se sabía si la mente seguía trabajando después de que el cuerpo mueriese. Los científicos han descubierto que la conciencia de una persona continúa funcionando después de perder la vida.

El Dr. Sam Parnia y su equipo de la Escuela de Medicina Langone, de la Universidad de Nueva York, exploraron esta posibilidad al estudiar investigaciones hechas en Europa y EE.UU. sobre personas que han sufrido un paro cardíaco y «han vuelto a la vida».

Parnia detalló que los pacientes describían a los médicos y enfermeras trabajando y detallaban que tenían conciencia de conversaciones completas, de imágenes de lo que estaba sucediendo, que de otro modo no conocerían. Sus recuerdos también fueron verificados por personal médico que informó que sus pacientes podían recordar los detalles veraces.

La muerte, en un sentido médico, es cuando el corazón deja de latir y se corta el reigo de sangre al cerebro. Esto significa que las funciones del cerebro también se detienen y ya no pueden mantener vivo al cuerpo.

Parnia explicó que la corteza cerebral del cerebro, la llamada «parte pensante» del cerebro, también se desacelera instantáneamente, y entonces se detiene, lo que significa que no hay ondas cerebrales visibles en un monitor eléctrico, entre 2 a 20 segundos. Esto finalmente resulta en una muerte cerebral.

Parnia y sus colegas también observaron cómo el cerebro reacciona durante un paro cardíaco, para determinar qué parte de estas experiencias se relacionan con la actividad cerebral.

De la misma manera, los especialistas estudiaron la mente y la conciencia humanas en el contexto de la muerte, para comprender si la conciencia se aniquila o si continúa después de perder la vida por algún período de tiempo, y cómo se relaciona eso con lo que está sucediendo dentro del cerebro en tiempo real.

El registro de actividad cerebral después de la muerte no es algo nuevo.

Médicos de una unidad de cuidados intensivos de Canadá descubrieron que una persona tenía actividad cerebral persistente hasta 10 minutos después de que apagaran su máquina de soporte vital.

Durante más de 10 minutos después de que los médicos declararan a la persona clínicamente muerta, las ondas cerebrales, como las que experimentamos mientras dormimos, continuaron ocurriendo.

Los investigadores también encontraron que la experiencia de la muerte puede ser muy diferente para cada paciente.

Cada paciente registró diferentes resultados electroencefalográficos, la actividad eléctrica en el cerebro, antes y después de la muerte.

Luego de examinar todas estas evidencias, los investigadores afirman que, aunque puede ser una experiencia particular en cada paciente, es posible que el cerebro conserve cierto nivel de consciencia después de la muerte. Todavía queda mucho por descubrir en este aspecto, pero son unos primeros indicios que, sin duda, abren posibilidades muy interesantes.

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