El mundo se integra por una mezcolanza infinita de culturas, costumbres y tradiciones, que le proporcionan a la historia universal su indiscutible riqueza. La mitología celta es clara muestra de ello. Este antiguo pueblo, politeísta y rico en los más variados símbolos y expresiones culturales, nos legó una historia que sobrevive hasta nuestros días. Personalidades como la Diosa Morrigan, reina de la guerra y la muerte, se combinan con manifestaciones como el símbolo de la Cruz Celta. Justamente nos pasearemos en esta oportunidad por el significado de la Cruz Celta, un elemento cargado de los más potentes mensajes.
El término Celta puede ser utilizado de forma amplia por los historiadores, para referirse al conjunto de pueblos de la Edad de Hierro, que se comunicaban empleando lenguas celtas, una de las ramas de las lenguas indoeuropeas. Sin embargo, existe un concepto más acotado, que habla de los Celtas como aquellos grupos de sociedades tribales de Europa, que se unieron por una misma cultura, nacida en la primera Edad de Hierro, entre los años 1200 al 400 a.C. Italia, Alemania, la República Checa y Rumanía, son algunas de las regiones que vieron nacer la cultura celta. Acompáñanos en Supercurioso a explorar todos los detalles sobre el significado de la Cruz Celta, uno de sus más potentes símbolos.
El Origen de la Cruz Celta
El símbolo de la Cruz Celta es uno de los más apreciados en esta cultura. Se trata de una representación que encuentra su origen en los antiguos pueblos celtas de Irlanda, Gran Bretaña y Francia. Aunque su similitud con la conocida cruz del cristianismo es notoria, el significado de la Cruz Celta se rastrea muchos años antes de que el cristianismo existiese. Si bien no existen documentos que manejen una teoría universalmente aceptada sobre su origen, se cree que puede tratarse de una derivación avanzada de la rueda solar.
En este sentido, se estima que las sociedades celtas más antiguas empleaban los círculos como una forma de representar el poder de la luna. La cruz, por su parte, representaba la potencia del sol. Muchos historiadores coinciden en la versión de que el significado de la Cruz Celta se asocia a la unión de un sol pagano como principio masculino, y a la luna como principio femenino. Siglos antes del cristianismo, los celtas de Europa empleaban el símbolo de la Cruz Celta en sus monedas, como un distintivo natural.
La prueba de que la Cruz Celta antecede por siglos al cristianismo, la encontramos en muchas lápidas precristianas que han sido encontradas en el territorio de Gran Bretaña, y en las que se erige este símbolo. Incluso, se reflejan desde la antigüedad nexos entre los Celtas y los cristianos. Uno de ellos es la leyenda irlandesa que narra que en el siglo V, San Patricio inició una cruzada de conversión de los Druidas paganos, personas que pertenecían a la clase sacerdotal de la Europa Céltica durante la Edad de Hierro, e incluso antes.
Al percatarse de que para los Druidas, el significado de la Cruz Celta era muy valioso, entendiendo el simbolismo del sol como fuente de poder y de vida, decidió combinar la cruz cristiana con el círculo celta de la eternidad. Fue así como el símbolo de la Cruz Celta sufrió un cambio que lo hizo asemejarse a la cruz cristiana, alargando notoriamente su brazo inferior. Fue así como pasó a convertirse en una representación del Cristianismo Celta.
El Significado de la Cruz Celta
En esta particular cultura, el significado de la Cruz Celta está dotado de una potencia trascendental. El símbolo de la Cruz Celta representa con sus cuatro brazos, la energía de los cuatro elementos: fuego, aire, agua y tierra. También hay estudiosos que se refieren con los brazos de la cruz, a los cuatro puntos cardinales: norte, sur, este y oeste. En ambos casos, los brazos se unen gracias a un círculo que los conecta y entrelaza, representando un puente de unión entre las energías divinas y la energía del hombre. Se trata de una asociación simbólica con el concepto del Árbol de la Vida.
El significado de la Cruz Celta también se asocia a las cuatro fiestas de estación que marcan el año celta: el Imbolc, el Beltane, el Lughnasadh y el Samhain. En estas cuatro etapas se alternan las celebraciones por el despertar de la naturaleza y la fertilidad de la tierra, la virilidad de los dioses y la fertilidad del ganado, la cosecha y la recolección de los frutos, y el cierre de las cosechas, que coincide con el fin del ciclo de la rueda celta.
En su representación asociada a los puntos cardinales, el símbolo de la Cruz Celta esconde la referencia a las deidades propias de esta cultura. El brazo de la cruz que da hacia el este representa al dios Lugh, que se vincula al aire y otorga la protección de su lanza guerrera. El brazo que da hacia el oeste habla de la presencia del dios Dagda, vinculado al agua y protector de la mente y el pensamiento. Al Sur se alza la diosa Nuada, que simboliza el fuego y defiende con su espada las emociones. Por último, encontramos al Norte la sede de la Piedra del Destino L’a Fáil, la Piedra de Tara, ligada a la tierra y donde solo los legítimos reyes son coronados y aprobados por los dioses druidas.
El símbolo de la Cruz Celta en el Tarot
Bien es sabido que el pueblo Celta tuvo grandes avances y sabios hallazgos en el campo de la astrología. Los estudiosos modernos de las ciencias esotéricas han sabido aprovechar este legado, al punto de que el significado de la Cruz Celta ha sido incorporado a la lectura de las cartas del Tarot, convirtiéndose en una de las tiradas más populares, según lo reflejan muchos de los más importantes libros del Tarot.
Esta cruz representa el movimiento en el momento presente. Su uso en el tarot permite ver el estado interno del consultante, y como éste se refleja en sus situaciones externas. Para la lectura del tarot empleando el símbolo de la Cruz Celta se utilizan diez cartas seleccionadas al azar, luego de barajar el mazo. Cada posición está conectada con las demás, y permite dar luces sobre el desarrollo de la situación consultada, en forma dinámica. Al mostrarnos la riqueza o potencialidades de una situación, la tirada de la Cruz Celta puede transformarse en una herramienta de descubrimiento.
El Tatuaje de la Cruz Celta
El significado de la Cruz Celta es tan potente, que ha sabido mantenerse vigente hasta nuestros días. Su aplicación a través de un tatuaje está también cargada de diferentes simbolismos. Tatuarse la Cruz Celta en alguna parte del cuerpo es una forma de rendir homenaje a la herencia étnica. Es por esto que es común encontrar este tatuaje en personas con origen irlandés, escocés o galés.
La mayor valía de esta imagen, además de la estética con la que puede ejecutarse al tatuar, se refiere al concepto religioso de la eternidad, representado por el círculo que encontramos dentro de la cruz. El símbolo de la Cruz Celta es uno de los muchos que desde la antigüedad, han encontrado un espacio de supervivencia, aportando a la grandeza de la historia y la cultura universal.