Las supersticiones y el temor a lo desconocido han marcado pautas para todo tipo de escenarios y contextos. El hombre crea paranoia, desconcierto e incluso terror en elementos que llegan a ser tan superfluos, que su temor raya en lo absurdo. Sin embargo uno de estos elementos se ha considerado hasta épocas relativamente modernas como un tabú. Hablamos del tritono del Diablo, una combinación musical que llegó a ser prohibida porque se relacionaba con la invocación al demonio. La escuchamos con naturalidad en el heavy metal e incluso en el jazz, pero en el pasado fue la causa de encarcelamientos e incluso asesinatos. Hoy en Supercurioso te contamos sobre la historia de estas simples notas musicales, que sumadas a la ignorancia, ocasionaron grandes males. Veamos.
¿Qué es el tritono del Diablo?
Todos hemos llegado a percatarnos de que en las escenas de películas de terror, la adición de una nota musical profunda y siniestra indica que algo aterrador está a punto de pasar: algún asesino saldrá con un hacha a enfrentar al protagonista, un fantasma está a punto de tocar el hombro de alguien… Actualmente sabemos y estamos acostumbrados al hecho de que estos tonos se usen para crear suspenso y se añadan como complemento del clímax de una escena que pretende mantenernos al borde del asiento. No obstante, en la Edad Media, cuando todo esto ni siquiera se sospechaba, la música se utilizaba como recurso en el arte sacro. Las iglesias tenían un dominio en este arte que realzaba las creencias religiosas.
Actualmente, se ha llegado a notar que un intervalo de notas era omitido en la mayor parte de las piezas musicales sacras del medievo, este es el llamado tritono “diabolus in musica” (el diablo en la música), ya que constituía una entonación relacionada con el terror. Se trataba de una especie de sonido profundo y largo que surgía tras un intervalo o distancia entre notas de tres tonos (que en música se conoce como “cuarta aumentada” o “quinta disminuida”). La combinación de las tres notas contiene seis semitonos de la primera a la última, en el entendimiento de la antigüedad esto marcaba el número de la bestia: el 666, por lo que debía ser prohibido.
1. ¿Qué es un tritono?
Al tritono del Diablo se le dotó de propiedades oscuras y siniestras, que le llevaban a ser absolutamente satanizado. Pero si nos vamos a los hechos, la realidad es que no es más que una parte de la música. En concreto, es un intervalo (una distancia entre notas), que se realiza en tres tonos. En palabras más simples, sería una distancia de tres notas. El tritono ocurre naturalmente en cualquier tono mayor en el intervalo formado entre el cuarto grado y el séptimo de la tonalidad. Otro elemento que le distingue en la lectura musical es que es un intervalo simétrico, es decir que, al escucharse invertido, sigue siendo el mismo.
2. La Edad media y el misticismo
Es bien sabido que en la época medieval los aspectos sobrenaturales, el demonio y todo tipo de contenido místico estaba a la orden del día. Cualquier fenómeno extraño o poco conocido iba estrechamente relacionado con prácticas satánicas y ocultismo, lo cual iba despertando cierta paranoia social que alimentaba estas ideas, evocando las más irracionales teorías para la explicación de hechos científicos. La música no era ajena a toda esta tendencia, por lo que el tritono del Diablo adquirió pronto una popularidad asociada con el terror colectivo.
En aquel entonces surgió la teoría de que existían sonidos disonantes, especialmente a raíz de lo que Aristóteles una vez designara como música digna, propia de espíritus elevados, y otra vil que hacía alusión al mal o a la “chusma”. A partir de esto la “disonancia perfecta” sería prohibida provocando la muerte en la hoguera o una estancia en prisión a todo aquel que se atreviera a entonarla.
El tritono del Diablo era para la Iglesia Católica, la forma que conseguía el maligno para colarse entre las personas. Se distinguía el sonido porque, lejos de generar una sensación de agrado, despertaba cierto grado de tensión, de un sonido chocante que alteraba a quien lo escuchase de cerca.
3. El Tritono se vuelve popular
Al ser una nota tan profunda, este intervalo conocido como el tritono del Diablo fue considerado como una forma perfecta para transmitir emociones de sufrimiento y dolor, por lo que algunos artistas comienzan a usarlo en la época del romanticismo, momento histórico en el que esas creencias paganas e incultas habían sido modificadas poco a poco. Además, el poderío y la autoridad de la iglesia católica habían ido en descenso, por lo que autores como Beethoven o Vivaldi, recuperaron este sonido para crear muchas de sus obras maestras. Posterior a esto, la aparición del Jazz marcó una era transmitiendo melodías profundas y emotivas gracias a que tenía un mayor contenido de tritonos.
Actualmente, el tritono del Diablo puede encontrarse en el género musical del Heavy Metal, siendo los pioneros en incursionar con este estilo el grupo Black Sabbath. Incluso, su propio guitarrista Tony Iommi, se refirió al tritono del Diablo de manera particular. El músico que fue pionero en el género expresó que al comenzar a escribir las canciones de la banda, buscaba simplemente algo que sonara bien, que tuviera un tono malvado, tétrico y oscuro, pero sin jamás tener en cuenta que estaba haciendo música demoníaca. A partir de este uso y de la música de esta banda, el metal acuñó el intervalo para crear atmósferas aún más siniestras y lúgubres, dando pie a que la iglesia católica calificara como música satánica a este estilo musical.
Y tú, ¿Qué opinas? ¿El tritono del Diablo es realmente una forma de contactar con el mundo espiritual? ¿Crees que la música como el heavy metal tiene algo de satánico? ¿O es simplemente la tradición católica sin mayores basamentos? Déjanos todas tus opiniones en un comentario. ¡Estaremos deseando leerte! Y si este tema te ha llamado la atención, puede que te interese conocer la curiosa y tétrica historia del violinista del diablo. ¡Alucinante!